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El romance marinero de Sorozábal
Zarzuela ·
La Quincena Musical recuerda al compositor donostiarra con una de sus obras más pasionales. Así se prepara 'La tabernera del puerto', que llega este domingo al Kursaal como uno de los platos fuertes del festivalHabrá dos celebraciones, una partitura exigente y hermosa y un importante elenco de músicos vascos. El público que se acerque este domingo al Kursaal se sumará al recuerdo de Pablo Sorozábal en su 125 aniversario, a los cien años de la Orquesta Sinfónica de Bilbao y disfrutará también de la batuta del maestro de Arrasate afincado en Corea Unai Urrecho.
El director, que había estado en el festival «hace veinte años, en los recitales de los jóvenes becarios que estudiábamos en el extranjero», asume la cita «con alegría y responsabilidad. Es un festival internacional muy importante, con un público exigente y melómano». Y lo hace dirigiendo una zarzuela de Sorozábal. «Siento un gran orgullo ante este proyecto. Tenemos compositores tan fantásticos... Espero que algún día en Corea se animen a programar obras como esta», asegura.
La zarzuela, que se ofrecerá en versión concierto, contará con la donostiarra Miren Urbieta-Vega en el papel de Mariola. «Es un personaje con muchas entrañas y eso me gusta. Mariola sufre, pero finge no sufrir; se enamora, pero lo esconde, y al mismo es muy valiente. Se enfrenta a quien la trata mal y dice las cosas como las siente», comenta la soprano. Desde el punto de vista vocal considera que «es un personaje con muchos registros. Demuestra ternura, carácter, miedo y también algo de virtuosismo. Abarca una tesitura extensa y por eso, aunque tradicionalmente la han cantado sopranos más ligeras que yo, me siento muy cómoda con ella». En su opinión, la música «es muy pasional, Los personajes cantan en todo momento expresando muy bien el estado en el que se encuentran. Sorozábal es uno de los mejores poniendo música al teatro. Su música llega muy fácilmente al oyente».
Junto a Urbieta-Vega estarán en el escenario el tenor Andeka Gorrotxategi, el coro Landarbaso y la Orquesta Sinfónica de Bilbao. Urrecho destaca de la agrupación, que este año cumple cien años, su «humanidad y profesionalidad. Son artistas con mucha empatía. Para mí es lo más importante. Y su nivel y flexibilidad son fantásticos». Completan el elenco Damián del Castillo, Rubén Amoretti, Ruth González, Marifé Nogales, José Manuel Díaz y Alberto Núñez.
El concierto dará la posibilidad de valorar aún más la música del compositor donostiarra al prescindir de la escena. «Para todos es un gran reto. Representar una zarzuela en versión concierto es delicado, ya que muchas de las conversaciones y de los números musicales necesitan de una actuación escénica, pero los cantantes son tan talentosos que suplirám esa cadencia con sus dotes musicales interpretativas», asegura Urrecho.
«Con la orquesta tenemos el mismo reto. El coro estará detrás de ella y los cantantes delante, y eso hace que haya cierta complicación técnica. Pero los músicos de la BOS son muy profesionales, el coro responde muy bien y los cantantes son fantásticos, así que será una velada muy especial».
Una partitura con influencia alemana
Sorozábal pasó varios años en Leipzig y Berlín, completando sus estudios de composición gracias a una pensión anual que le concedió la Diputación de Gipuzkoa. La técnica alemana que adquirió durante esta época está especialmente presente en 'La tabernera del puerto', obra en la que se puede ver una cierta influencia de la música de Wagner, como por ejemplo en la orquestación, pero esta zarzuela no abandona las características propias de la música popular, lo que la hace especialmente compleja para los intérpretes.
'La tabernera del puerto' se estrenó en Barcelona en 1936 con gran éxito, si bien la Guerra Civil obligó a suspender las representaciones, que se retomaron tras la guerra, en 1940 en el Teatro de la Zarzuela de Madrid. Federico Romero y Guillermo Fernández Shaw, autores del libreto, se lo ofrecieron primero a Jesús Guridi. Éste rechazó la propuesta y finalmente fue el donostiarra quien compuso la música de este romance marinero. La acción se desarrolla en el cerrado ambiente de un imaginario pueblo marinero del norte de España, en el que algunos de sus habitantes se dedican al contrabando. Marola, la tabernera protagonista de la zarzuela, se verá sacudida entre los intereses económicos y amorosos de los personajes masculinos de la obra.