Los temporales abren un nuevo socavón en la carretera de la costa entre Getaria y Zumaia

Según ha informado este martes la Diputación de Gipuzkoa, las lluvias de la pasada semana han provocado un derrumbe y socavación del muro de la carretera de la costa entre Getaria y Zumaia; cerca del mirador Kartarena (entre los p.k. 24,288 y 24,310). Los daños han afectado al muro de costa en un tramo de 12 metros de longitud y al revestimiento de mampostería hormigonada situado sobre el muro para proteger el relleno de la carretera en una longitud de 22 metros.

Este nuevo socavón tiene una profundidad aproximada de diez metros y afecta al carril exterior de la carretera, que está cerrado. La circulación se mantiene por el carril interior con paso alternativo de vehículos regulado mediante semáforos.

El departamento de Infraestructuras Viarias ha informado de que actuará de urgencia en la zona afectada los próximos días. El muro de costa a reconstruir tiene una altura de 3 metros y se ejecutará con una mezcla de piedra de escollera y hormigón. Una vez ejecutado el muro, se repondrá sobre este el revestimiento con piedra de mampostería hormigonada en un talud inclinado de 7 metros de longitud, el revestimiento llegará hasta la barrera de protección de la carretera.

Estos trabajos se unirán a los que ya está en marcha en otro punto de esta misma carretera, concretamente en el tramo entre Zarautz y Getaria. En este punto el socavón afecta a los dos carriles por lo que la vía está completamente cerrada al tráfico. Y así seguirá «al menos tres semanas», según informan desde Diputación, tiempo estimado para poder abrir al menos un carril y poder dar paso alternativo a los vehículos. Mientras la carretera permanezca cerrada se prohibirá el paso de los camiones de más de 15 toneladas por la carretera de Meaga. Así, los vehículos pesados deberán circular por la autopista con el objetivo de mejorar el flujo de tráfico en la citada vía.

Además, también cabe recordar que desde el lunes, la Diputación mantiene habilitado un nuevo canal en 'Telegram' llamado 'N-634 kosta' en el que se informará sobre aperturas y cierres de la N-634.

Tras los últimos socavones abiertos en las carreteras del litoral guipuzcoano, que obligan a cerrar o limitar temporalmente el tráfico de vehículos, peatones y ciclistas por esas vías con el consiguiente impacto en las rutinas diarias de los ciudadanos, la Diputación de Gipuzkoa ha anunciado este martes que va a reforzar la atención sobre estas vías, de modo que puedan estar mejor pertrechadas ante la llegada de temporales. El objetivo es realizar un seguimiento más exhaustivo de su estado de conservación en cada momento, de modo que tengan una mayor capacidad de resistencia cuando reciban el embate de las olas, y en caso de que se produzcan destrozos, que estos sean lo más limitados posible. Para ello se servirá de sistemas de control y seguimiento basados en nuevas tecnologías y de aparatos de revisión y vigilancia, como drones.

Así lo ha anunciado la portavoz del Gobierno foral, Irune Berasaluze, durante su comparecencia para dar cuenta de las decisiones del Consejo de Gobierno. Ha subrayado la «sucesión de incidencias» que los temporales han ocasionado en las carreteras de Gipuzkoa en los últimos días, como los socavones en la N-634 entre Zarautz y Getaria el 11 de febrero, el de la GI-638 en Mutriku el día 26, o el conocido hoy mismo entre Zumaia y Getaria. A estos hay que añadir el corrimiento de tierras registrado el domingo en las faldas de Jaizkibel, en Hondarribia.

Berasaluze ha llamado la atención sobre el hecho de que «el impacto de los temporales se ha intensificado en los últimos dos años» en las carreteras de costa, que ya venían siendo «tramos complicados» históricamente. Ante este hecho, y la perspectiva de que los fenómenos meteorológicos adversos se sucedan con mayor asiduidad y fuerza en el futuro, la Diputación acometerá «actuaciones especiales» para reforzar la «resiliencia» de las calzadas del litoral.

Fuentes del departamento de Infraestructuras Viarias que dirige Maria Ubarretxena (PNV) han explicado más tarde que la Diputación tiene contratado desde hace diez años un servicio de vigilancia y mantenimiento específico para las carreteras que se sitúan al borde del mar, y que toca renovarlo este año, en primavera o verano. Es en esta renovación en la que se exigirán medidas de vigilancia, control periódico y respuesta «más intensivas» que las actuales para que estas calzadas estén mejor preparadas ante la llegada de temporales.