Tributo de espadas a la Virgen

Este lunes, como cada 15 de agosto, los dantzaris de Irrintzi dantza taldea volvieron a rendir tributo de espadas a la Virgen de la Asunción. Cuatro capitanes acompañados de otros ocho dantzaris en la 'soka' interpretaron la tradicional ezpata-dantza en la iglesia parroquial de Zumarraga. Este baile solo se ejecuta el 2 de julio en la ermita de Antigua y el día de la Virgen en la parroquia. Cabe recordar que hasta el año 1972 las fiestas patronales de Zumarraga se celebraban a mediados de agosto.

Rste lunes los protagonistas fueron Lide Mendiaraz, Maddi Barrena, Miren Hernández e Irati Etxeberria. Les acompañaron en la cuerda Sara Bidarte, Nahia Alustiza, Naroa González, Nekane Martín, Mikel Antia, Paula Urteaga, Elena Urteaga e Iñaki Urteaga.

El baile tuvo lugar antes del inicio de la misa de once. De poner música al evento se encargaron los miembros de Antxiñako Ama txistulari taldea: Mariaje Arratibel, Iñaki Aldalur, Maialen Zubizarreta, Aitor Calvo, Lierni Goia, Ainhoa Zumarraga, Oier Zabaleta y Mikel Guridi.

Los actos comenzaron minutos antes en los bajos del ayuntamiento, donde concentrados txistularis, dantzaris y autoridades se dirigieron en comitiva hasta la iglesia. Después de interpretar la ezpata-dantza, los dantzaris y txistularis abandonaron el templo, en el que continuó la misa.

Finalizado el oficio religioso, dantzaris y txistularis acompañaron a la corporación hasta la trinchera, lugar en el que bailaron la kaleko ezpata-dantza, el aurresku de honor en el que también tomaron parte varios vecinos y otros bailes. Cabe señalar que habitualmente todos estos bailes se llevan a cabo en la plaza de Euskadi, pero este año no ha sido posible porque este espacio está siendo objeto de una renovación integral.

Maddi Barrena bailó el aurresku de honor ante su madre, Ane Miren Arrazola. El 2 de julio es el alcalde quien decide a quién se baila el primer aurresku, pero el 15 de agosto eligen los propios dantzaris. «Se lo he dicho a mi madre a última hora, cuando salía de casa», explicó la dantzari. Maddi se estrenó como capitana el 2 de julio. «El ambiente es muy diferente al de Antigua, allí hay mucha más gente y hay más presión, pero ha sido igual de bonito. Te emocionas igual», explicó ayer. La que estaba emocionada era su madre. «Me he puesto un poco nerviosa, pero ha salido todo muy bien. Es un día muy bonito», afirmó. El segundo aurresku de honor fue para Xabi Piriz, interpretado por su pareja, Lide Mendiaraz.

Irati Etxeberria, que también se estrenó el 2 de julio como capitana, explicó que en esta ocasión «no estaba tan nerviosa» como ese día en Antigua. «En agosto no hay tanta gente y pasas menos nervios, pero es igual de especial».

Miren Hernández explicó que el nuevo escenario «facilita el baile, porque el suelo es regular, aunque la plaza tiene otra gracia».

Tanto la ezpata-dantza como los bailes del exterior tuvieron este lunes poder de convocatoria.

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