Aretxabaleta

Febrero de reposiciones y podas

La filosofía, resumía Albizu, es «dejar crecer con todo su porte a los árboles que no ocasionen afecciones, y controlar el crecimiento de los ejemplares que sí lo hacen». Una de esas podas controladas recaerá en los robles que crecen en las calles Mitarte y Durana. Estos emblemáticos árboles, a los que Aretxabaleta debe su nombre (paraje de anchos robles), han ido adquiriendo porte con el paso de los años, y, como apuntaba Albizu, las calles Mitarte y Durana no son grandes avenidas, y estos ejemplares ya empiezan a ocasionar algunos problemas por su creciente cercanía a las viviendas.

«También es cierto que constituyen un arbolado de gran belleza, con el añadido del carácter simbólico que entraña con el municipio. Pero hay que controlar su crecimiento, no se les puede dejar crecer de forma natural porque no caben», señala este edil.

El ayuntamiento quiere que, en el futuro, todas las actuaciones en materia de arbolado público se realicen en base a criterios profesionales. Para ello se contratarán los servicios de una empresa especializada para realizar un estudio a modo de plan director del arbolado en el municipio. En él se fijarán los criterios sobre qué variedades de árboles se pueden plantar en los distintos espacios urbanos, a qué distancia de las fachadas, los tipología y periodicidad de las podas a realizar... Es decir, «todo lo que ahora tratamos de hacer, pero plasmado en un documento guiado por criterios profesionales» explicaba el teniente de alcalde.

«La realización de este estudio se adjudicará este año, con el objetivo de que ese plan director esté ya vigente para la campaña de poda del próximo otoño-invierno».

No será sin embargo el único estudio profesional sobre esta material que el consistorio va a recabar este año.

Los recientes vendavales han derribado algunos ejemplares, como el tilo que crecía frente a la panadería y otro que lo hacía delante del Eroski de Azbe, así como una conífera de gran porte del jardín trasero del edificio consistorial, que se desplomó hacia el paseo de ribera de Lausita.

El ayuntamiento va a encargar a un profesional especializado un estudio que evaluará la seguridad de los diferentes espacios arbolados públicos y de ejemplares concretos. Así, dependiendo del peligro que eventualmente entrañen, propondrá medidas a adoptar en cada caso.

«Determinará si el ejemplar estudiado está sano y no comporta riesgo, o si necesita una poda para reducir su copa y volumen o si es preciso eliminar el árbol por seguridad. Estudiará el estado del roble solitario que crece junto a la iglesia, o sobre el parque trasero de Santa Cruz o los robles de Mitarte y Durana».

Ion Albizu reveló que el ayuntamiento planea realizar una intervención integral en la plaza el año que viene para sustituir las actuales encinas por otra especie más idónea para las características del suelo. Y es que el subsuelo de la plaza «es un verdadero barrizal rebosante de humedad», en palabras de Albizu.

Las encinas necesitan un suelo seco para prosperar, y las raíces de los primeros ejemplares de la parte derecha se pudrieron y los nuevos retoños plantados tampoco lograron prosperar. Uno se pudrió y fue retirado, y el segundo «tiene poco futuro».

Los ejemplares de la izquierda (hacia el lado de la farmacia), «que lucían mejor aspecto», comienzan a adolecer los primeros efectos del exceso de humedad.

El ayuntamiento los va a reemplazar por otra especie arbórea que se acomode bien a este suelo húmedo. «Estamos analizando con expertos qué variedad puede ser la más idónea», decía Albizu.

Hay especies adaptadas para este tipo de suelo, pero asimismo hay que valorar otros criterios como la estética, la frondosidad y sombra. El roble puede ser una opción, «pero es caducifolio, y además tiene el inconveniente que produce gran cantidad de bellotas que pueden resultar problemáticos por resbaladizas».

Los tilos tienen el inconveniente de ser árboles «blandos que cuando alcanzan un gran porte presentan el riesgo de caer, como le ocurrió al que crecía frente a la panadería».

Los responsables municipales barajan otras opciones como los magnolias y otras variedades que se considerando para el futuro arbolado de la plaza.