El director alemán Gerd Albrecht dirige por primera vez a la OSE
En el séptimo programa de abono tendrá lugar el estreno absoluto de la obra 'White Numbers' de James Dillon
T. FLAÑO
Jueves, 26 de enero 2012, 09:48
La Orquesta de Euskadi continúa con su programación en el año que se cumple el treinta aniversario de su creación. El auditorio donostiarra del Kursaal será hoy el escenario de un nuevo concierto que contará con la dirección del alemán Gerd Albrecht (Essen, 1935), experto en compostores alemanes y austríacos del romanticismo.
En este séptimo programa de abono, que además de hoy y el lunes en San Sebastián también se ofrecerá en Vitoria, Pamplona y Bilbao, se podrá escuchar 'White Numbers', del compositor escocés afincado en Minessota James Dillon. Se trata de un estreno absoluto que se enmarca dentro del proyecto Tesela con el que la OSE conmemora su treinta aniversario.
Es la primera vez que Gerd Albrecht se pone al frente de la Orquesta de Euskadi, aunque en Donostia ya ha estado en la Quincena Musical de 1995. El alemán ha apostado por una obra que él mismo estreno en 1996, la suite 'Cymbeline' de Alexander Zemlinsky, que la compuso en 1914 pero que quedó inédita al comenzar la primera guerra mundial. Esta obra cuenta con una pieza, 'Lied des Cloten', para soprano que estará intepretada por Petra Froese.
Albrecht ha sido titular de la Ópera de Kassel, Deutsche Oper de Berlín o la Sinfónica de la Radio Danesa en Copenhage. Se ha caracterizado por abordar la obra de autores románticos como el propio Zemlinsky, Fortner, Ligeti, Penderecki y Schnittke, además de relacionarse con compositores de principios del siglo XX entre los que se encuentran Schoenberg, Berg, Webern e Hindemith. Otro de los aspectos por los que ha destacado este director alemán es porque ha rescatado la obra de compositores olvidados, víctimas de los campos de concentración, como Ullman, Klein o Hass. Una de las preocupaciones de Albrecht es la formación musical, tanto de niños como de adultos. Ha publicado varios libros infantiles y en 1989 creó la Fundación Música para Jóvenes, que sufraga el desarrollo de jóvenes talentos, y el Museo del Sonido donde se experimenta con más de cincuenta instrumentos y por donde han pasado 30.000 niños.