Uno de los etarras detenidos en Francia tenía material para fabricar artefactos explosivos

Los etarras detenidos el sábado en Francia tenían en su poder material para fabricar artefactos explosivos. En una de las dos bolsas de deporte que llevaba Jon Etxebarria Oiarbide se encontró, según la información proporcionada por el Ministerio del Interior, resina de cristal, epoxy, que es otra resina industrial, y circoflex, un material de pirotecnia. Estos componentes, según la Policía, habían sido adquiridos en el mercado recientemente. El presunto terrorista llevaba también encima dos tarjetas de identificación de la Guardia Civil, dos DNI falsos y teléfono móvil sin batería y dos placas de matrículas falsas.

Etxeberria Oiarbide es uno de los responsables del aparato logístico de ETA en Francia, según precisaron fuentes de la lucha antiterrorista española, aunque no su máximo responsable. Fuentes de la lucha antiterrorista francesa señalaron a su vez que Etxeberria participó el 16 de marzo de 2010 en el tiroteo en que perdió la vida el gendarme Jean Serge Nérin.

En España tiene además numerosos antecedentes por violencia callejera, e incluso fue condenado por la Audiencia Nacional en 1999 a cinco meses de cárcel por un ataque contra instalaciones de la Seguridad Social, pero no ingresó en prisión. En 2001, fue capturado por la Guardia Civil en Vitoria acusado de colaborar con el comando Ustargi, un grupo que vigilaba posibles objetivos terroristas, pero salió en libertad bajo fianza.

El presunto miembro de ETA fue detectado el sábado por la tarde por agentes franceses y miembros de la Guardia Civil en una estación de tren de París. Su identificación fue sencilla por la corpulencia del individuo, que tiene una orden de busca y captura internacional dictada por la Audiencia Nacional desde el 6 de junio del año pasado. La Guardia Civil comprobó que sus huellas estaban en el interior de la furgoneta con material de ETA interceptada en el 9 de enero de 2010 en la localidad zamorana de Bermillo de Sayago y que tenía como destino la vivienda de Obidos, en Portugal, en la que la organización terrorista pretendía instalar una base logística para atentar en España. Antes, el 19 de diciembre de 2001, la Guardia Civil había comprobado que sus huellas también estaban en una carta que apareció en el domicilio de Asier Oiarzabal, responsable del aparato logístico de ETA detenido.

Armas

Los agentes españoles y franceses arrestaron a Etxeberria al llegar a la estación de Joigny, no lejos de la capital francesa, donde se reunió con Iñigo Sancho y Rubén Rivero, que habían llegado al apeadero en un coche robado. El trío no ofreció resistencia al ser capturado pese a que todos llevaban pistolas, armas que el Ministerio del Interior no identificó en la información proporcionada hoy.

Sancho y Rivero, no tenían material para artefactos explosivos, pero sí 15 DNI, cuatro tarjetas de identidad de la Guardia Civil, un documento portugués, otro francés, varias placas de matrículas falsas y dinero que Interior no cuantificó. A diferencia de Etxeberria, ninguno de los dos tiene pendiente causa alguna por terrorismo en la Audiencia Nacional.

Los dos pertenecen a Segi y estaban huidos desde 2010, Sancho desde mayo de ese año y Rivero desde diciembre. Este último tiene orden de búsqueda dictada en octubre de 2010 por un juzgado de la localidad vizcaína de Balmaseda por un presunto delito electoral.

Los arrestos de produjeron 48 horas antes de que el presidente francés, Nicolas Sarkozy, reciba este lunes en el Palacio Real el Toisón de Oro de manos de dos Juan Carlos por su colaboración en la lucha antiterrorista, pero fuentes gubernamentales descartaron que un hecho tenga relación con el otro. Interior aseguró que fue una operación rutinaria.

«No hay riesgos»

El consejero de Interior del Gobierno Vasco, Rodolfo Ares, por su parte, señaló que pese a que «ETA no ha desaparecido» todas las «informaciones y datos que tenemos» indican que «no hay riesgos de que vuelva a la actividad terrorista». Asimismo, anunció que mientras existan terroristas que están reclamados por la justicia o forman parte de ETA «serán detenidos y puestos a disposición de la justicia».

Tras señalar que se han ido adoptando medidas de ajuste de la seguridad con cada uno de los viceconsejeros, así como con otras personas que llevaban también protección, el consejero matizó que en el caso de los viceconsejeros estos no tendrán medidas de protección directa, pero sí «otras medidas de contravigilancia».