Degustar el Museo sorbo a sorbo

Son muchas las personas de fuera de Eibar que por uno u otro motivo han pasado por la ciudad en los últimos años y se han acercado a visitar el Museo de la Industria Armera. Sin embargo, también son muchos los que viviendo aquí no conocen un equipamiento que fue demandado durante años. La quinta planta de Portalea acoge un repaso de toda la historia de Eibar a través de su industria y para dar a conocer este legado se han llevado a cabo distintas acciones. La última de ellas es la más dulce, ya que miles de azucarillos desvelan curiosidades que tienen su respuesta en el Museo de la Industria Armera.

Este proyecto nació de una de las reuniones preparatorias del centenario de Armeria Eskola que se celebra el año próximo. La empresa eibarresa Urkotronik había lanzado en su día una edición de azucarillos con preguntas sobre Eibar. Y se planteó hacer algo similar con el Museo.

Así, desde hace varias semanas se están distribuyendo unos azucarillos que por un lado muestran el logotipo del centenario de Armeria Eskola, que también se promociona en esta iniciativa, y por el otro plantea preguntas sobre el Museo. «Es una forma de provocar la curiosidad de quienes lo leen», explica la responsable del Museo Marina Barrena. «Así se pretende dar a conocer el Museo a quienes lo tienen más cerca, porque no es suficientemente conocido para muchos vecinos. Después de cinco años hemos conseguido que la mayoría sepa que aquí hay un museo, y el azucarillo es un recordatorio para que se acerquen a conocerlo mejor».

Lambrettas, armas y bicis

¿Sabes de qué año es la Lambretta más antigua que se encuentra en el Museo? ¿Sabías que la pistola JO.LO.AR fue la primera pistola utilizable con una sola mano, por lo que era idónea para los mancos? ¿Sabías que la firma Beistegui Hermanos (BH) compaginó la fabricación de bicicletas con la actividad armera hasta después de la Guerra Civil? Son tres de los cuarenta azucarillos distintos que se pueden encontrar, veinte en castellano y veinte en euskera, y que cierran su pregunta con un 'Busca y encontrarás la respuesta en el Museo'. «Están teniendo una aceptación estupenda, incluso entre coleccionistas», señala el gerente de Urkotronik Carlos Abad. Estos azucarillos ya han viajado a Utrera o San Sebastián y es por ello que la empresa ha realizado unas cajas alusivas a la historia de la industria eibarresa y Armeria Eskola.

Pero la promoción del Museo no es sólo cuestión de marketing. «Estamos muy contentos con esta idea porque nos ha permitido conocer mejor el Museo», explica Abad. «Los trabajadores de Urkotronik hicimos una visita, había gente que no lo conocía y salimos realmente impresionados. Hay que animar a la gente a que conozca el Museo y la historia de la industria de Eibar porque es apasionante».

Desde el Museo, la satisfacción por esta idea también es alta, ya que el azucarillo puede suponer un recordatorio para mucha gente. «El momento de tomar un café es un momento de tranquilidad, da pie a leer lo que nos dice y si estamos acompañados se puede comentar lo que se señala», opina Marina Barrena. Estos azucarillos se podrán encontrar acompañando el café hasta el próximo año, en que Armeria Eskola celebra su centenario.