La colocación de las vigas y los arcos del quinto puente se inicia la próxima semana
Desde principios de mayo se trabajará sobre el cauce del río, y las obras no terminarán hasta después de verano
AINGERU MUNGUÍA
Miércoles, 14 de abril 2010, 09:46
Las obras del quinto puente van a comenzar a moverse. La semana que viene serán transportados hasta San Sebastián las vigas y los arcos de la nueva estructura que enlazará ambas márgenes del río a la altura del hotel Amara Plaza. Técnicos municipales dieron la pasada semana el visto bueno a las piezas, que se han construido en una empresa de Langreo (Asturias).
Los donostiarras, sobre todo los vecinos de Amara, no veían el día en que avanzara esta infraestructura que comenzó a ejecutarse en el verano de 2008. Su diseño lo firma la ingeniería LKS y la obra se adjudicó a la UTE formada por Construcciones Donosti S.A., Urbanizaciones Iruña S.A. y el Grupo Mecanotubo S.A. por un importe de 5.377.104 euros. Pero la ejecución ha tenido varias incidencias que han retrasado mucho el programa de obra. Se decidió un cambio de materiales para abaratar costes que demoró la construcción de las piezas. Igualmente se modificó la forma de llevar a cabo los trabajos para, entre otros objetivos, evitar la invasión de un carril del paseo Bizkaia, según explicó hace unos meses la concejala Duñike Agirrezabalaga. Todo ello ha retrasado varios meses la obra y ha encarecido un 9% el presupuesto hasta los 5,7 millones de euros.
Empresa de Langreo
La UTE subcontrató la construcción de las piezas del puente a la empresa Ascamon de Langreo, a donde viajaron el viernes pasado técnicos del Departamento de Obras y Proyectos para dar su visto bueno antes del transporte de las mismas a San Sebastián. El envío se realizará la semana que viene, aunque desde el mismo lunes está previsto que se ponga en marcha el operativo de montaje. Los elementos más destacados del puente Lehendakari José Antonio Aguirre será los dos arcos de acero al carbono que volarán de estribo a estribo en sentido longitudinal por encima de las dos aceras del puente.
Los primeros trabajos empezarán en el «nudo de arranque del estribo derecho» del puente -en el lado opuesto al hotel Amara Plaza-, seguirán con las labores para colocar los arcos y los tirantes, para terminar fijando las vigas transversales. La última fase consistirá en el hormigonado de la estructura antes del asfaltado y la pavimentación de la plataforma.
Es un puente sin pilas sobre el río cuya imagen destaca por los dos arcos gemelos que se elevan 3,6 metros sobre la rasante. La zona comprendida entre ambos arcos se destina al tráfico de vehículos y se «humaniza», según explica la memoria del proyecto, con una acera de pavimento cerámico en diferentes tonos azules. La acera norte, más ancha, tendrá un suelo de madera, contará con una bancada situada junto a la margen derecha y su anchura estará delimitada por una barandilla de perfil curvo.
El nuevo puente tendrá como función embocar a los conductores donostiarras hacia el sexto puente para desde allí dirigirse por la A-8 sentido Irún o bien coger la Autovía del Urumea.
