Chávez cierra 24 canales de TV que no emiten sus mensajes
Caceroladas de protesta en contra de la medida
MILAGROS L. DE GUEREÑO
Lunes, 25 de enero 2010, 02:44
El mismo día que oficialismo y oposición de Venezuela conmemoraron con marchas pacíficas el 56 aniversario del advenimiento de la democracia, el presidente Hugo Chávez volvió a armarla al sacar del aire a varias señales de televisión, entre ellas la muy crítica y popular RCTV y otros 23 canales más, por no cumplir con una reciente ley que les obligaba a transmitir los mensajes del mandatario. De inmediato, en varios puntos del país hubo cacerolazos de protesta y la oposición denunció un «zarpazo a la libertad».
Los propietarios del canal privado RCTV denuncian la persecución del Gobierno chavista y sus 1.500 trabajadores afrontan un futuro incierto. Su salida de la red abierta en el 2007 provocó masivas y violentas movilizaciones populares lideradas por los estudiantes. En julio pasado, fueron cerradas otras 32 emisoras de radio. En la medianoche de ayer volvieron a quedarse mudos. «Fue el regalito» de Chávez , ironizó el diputado Juan José Molina, del partido opositor Podemos.
El presidente de la Cámara Venezolana de Televisión por Suscripción (Cavetesu), Mario Seijas, informó que la suspensión se extendió a otros 23 canales, incluidos canales Ritmo Son, Momentum, América TV, American Network y TV Chile, mucho menos populares en el país, que llegan a través de varias operadoras de pago. Los canales pueden presentar recursos ante la Justicia.
Poco antes, el presidente de la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), Diosdado Cabello, exhortó a los operadores y directivos de canales a respetar la norma vigente que obliga a los canales considerados nacionales, es decir que tengan un 30 % de su programación semanal de producción nacional, a emitir en directo las «cadenas», término con el que se conoce a los mensajes de Chávez a la nación y que en ocasiones han llegado a durar hasta ocho horas. «No importa si dedican espacios a atacar al Gobierno, deben regirse por la legislación», advirtió en rueda de prensa el también ministro de Obras Públicas, quien anunció el «proceso administrativo».
«Zarpazo a la libertad»
Según Cabello, «no se trata de cerrarlas, pueden seguir transmitiendo su programación en otros países, pero para hacerlo aquí tienen que cumplir con las normas venezolanas, tal y como ocurre en cualquier parte del mundo». No comparten esa opinión en el sector antichavista. Para el movimiento opositor Mesa de la Unidad, la medida mostraba el «ensañamiento» y era un «zarpazo a la libertad de expresión».
En una nota denunciaron que «el Gobierno que no puede con la inseguridad ciudadana, que produce la inflación más alta de América Latina y que no ha sido capaz de gestionar servicios básicos como la electricidad y el agua, se desahoga cerrando emisoras, negando al pueblo su derecho a informarse y entretenerse con libertad».
Molina consideró que el Gobierno pretende radicalizar la situación interna del país para que se suspendan las elecciones legislativas de septiembre, donde podría perder la mayoría parlamentaria.