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El secretario general del PSE, Patxi López, durante la conferencia de ayer en Donostia. /LUSA
López afirma que está dispuesto a conseguir todas las transferencias pendientes e incluso otras nuevas
POLÍTICA

López afirma que está dispuesto a conseguir todas las transferencias pendientes e incluso otras nuevas

El líder del PSE apuesta por reformar del Estatuto para hacer factible una consulta Anuncia que si es lehendakari convocará a los partidos democráticos a una mesa

A GONZÁLEZ EGAÑA

Jueves, 30 de octubre 2008, 03:00

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DV. Patxi López aseguró ayer que está dispuesto a sentarse en Euskadi y con el Gobierno de Rodríguez Zapatero para negociar las transferencias pendientes, conseguirlas todas e incluso poner sobre la mesa otras nuevas, como la de la consulta, «siempre mediante el pacto y el entendimiento». El secretario general de los socialistas vascos hizo esta afirmación en el coloquio posterior a la conferencia que ofreció en el 'Foro Humanidades. Gipuzkoa XXI' organizado por la Universidad de Deusto en San Sebatián, donde también precisó que antes que nada hay que ponerse de acuerdo sobre cuáles son esas competencias, «ya que tampoco sobre eso hay ningún acuerdo».

López se mostró convencido de que Euskadi «sólo se puede construir desde el consenso» y anunció que lo primero que hará si es lehendakari será convocar a todos los partidos democráticos para sentarlos a una mesa y tratar de recuperar el entendimiento. Reprochó a Juan José Ibarretxe que en diez años no ha sido capaz «nunca» de levantar el teléfono para convocar a los partidos políticos democráticos a una mesa, «cuando aparecía como el campeón del mundo del diálogo hasta el amanecer».

El problema de este país, reflexionó, es que «algunos llevan mucho tiempo intentando imponer los pensamientos o los proyectos de una parte». López dio un paso más y aseguró que está dispuesto a sentarse en una mesa incluso con quienes piensan que «el entendimiento es acercarse a sus posturas y no a las de los demás».

El candidato socialista a lehendakari afirmó que desea la celebración de un referéndum «vinculante» en Euskadi, pero «una vez que se hagan los deberes», y no una consulta no vinculante que «nace de la imposición», como la propuesta por el lehendakari.

En su intervención apostó por recuperar el pacto entre diferentes y llevar a cabo una reforma estatutaria que «haga factible la consulta a la ciudadanía» en aquellas materias que sean de competencia de Euskadi. Defendió que cuando una sociedad es tan plural en las ideas y tan diversa en los sentimientos de pertenencia como lo es Euskadi, «sólo el pacto entre diferentes, sólo el respeto y la convivencia de esa pluralidad garantiza su futuro». En ese punto, expuso que el País Vasco cuenta con dos proyectos sobre la mesa, «uno que pretende romper con ese pacto estatutario» para avanzar hacia la independencia y otro, el del PSE, que propone «recuperarlo».

Las preguntas del coloquio elevaron el tono cuando un joven pidió a López explicaciones de «cómo podemos avanzar en la construcción nacional sin que nos metan a todos en la cárcel» o «por qué me veo obligada a ser torturada». El líder del PSE fue claro y respondió que «para hacer política hay que alejarse de la violencia». A las dudas manifestadas por un asistente sobre la responsabilidad de la ruptura del proceso de paz, López le recordó que fueron los representantes de la izquierda abertzale los que «no quisieron romper las amarras con el mundo de la violencia».

El debate no se pudo alargar más de media hora por «un motivo lúdico». El mismo López lo explicó al comenzar su intervención: «Me llega al alma ir a ver el partido de la Copa entre mi equipo, el Portugalete, y el Valencia, un hecho histórico en mi pueblo».

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