Iturbe asegura que el proyecto de integración es el único viable

El presidente de Kutxa, Xabier Iturbe, aseguró ayer que el proyecto de integración que han acordado iniciar los regentes de las tres cajas vascas es el único viable en estos momentos, ya que mantiene la esencia de las cajas y puede ser aceptado por el conjunto de los grupos e instituciones que componen las mismas.

Iturbe rompió así el silencio que ha mantenido hasta el momento sobre el proceso de integración. El pronunciamiento público se produjo durante la Asamblea General de la Kutxa, que tuvo lugar ayer en Donostia, en la que se aprobaron los resultados de 2010 así como el presupuesto para este año de la Obra Social.

El presidente de Kutxa señaló que en el actual contexto de reestructuración de las cajas españolas se han producido este año dos hechos relevantes como han sido la Ley de recapitalización, que fuerza a la integración y bancarización, y el anuncio de La Caixa de traspasar toda su actividad financiera a un banco, acogiéndose a una nueva regulación que permite a las cajas de ahorro el ejercicio indirecto de la actividad financiera a través de una licencia bancaria.

Destacó que tras «valorar objetivamente nuestra situación como buena, hemos considerado que con vocación de proyecto de país es el momento de dar un paso en la integración de las cajas vascas y junto con la BBK y la Caja Vital pretendemos dar forma a un proyecto que alumbre una gran entidad para Euskadi».

El máximo responsable de la caja guipuzcoana indicó que el marco consensuado por los presidentes para arrancar las negociones es precisamente el de la licencia bancaria, ya que entienden que «es el que mejor recoge y protege la esencia de una caja de ahorros, utilizando de una manera instrumental dicha licencia».

Iturbe quiso dejar patente que está poniendo todo su empeño personal en que este proceso salga adelante. Así, indicó que en las últimas semanas está realizando personalmente un esfuerzo de comunicación de los aspectos del acuerdo inicial con todos los grupos que componen la asamblea.

Expresó su convencimiento de que en breve podrán presentar un proyecto que será debatido y «espero -aseguró-, sea aprobado por la mayoría cualificada de la asamblea». Y es que el proceso de integración deberá ser ratificado por dos tercios de las respectivas asambleas, es decir, requerirá del apoyo de 67 de los 100 consejeros.

El presidente de la entidad apuntó que «seguramente no será el proyecto al 100% que hubierámos deseado cada uno de nosotros, pero sí será el único posible que, manteniendo las esencias de cajas de ahorro sea aceptable para el conjunto de los grupos e instituciones que tiene la responsabilidad de consensuar un futuro mejor para todos». Así, mencionó a los clientes de la entidad, a los empleados, pero también a las empresas y a la sociedad guipuzcoana en general.

Recordó que tras el proceso de integración las cajas mantendrán su carácter social, la Obra Social y el compromiso con el territorio.

El optimismo que rezumaba respecto al proceso de integración contrastó con su visión pesimista de la situación del sector. Indicó que las noticias no son nada positivas. A su entender, la reestructuración financiera no acaba de consolidarse y la necesaria capitalización no tiene perspectivas de poder cumplirse.

Aumento de la morosidad

Asimismo pintó un panorama económico para este año poco halagüeño. «Prevemos una continuidad en el aletargamiento de la economía y no se espera una reacción positiva ni en el incremento de la demanda ni de la producción, y por lo tanto no esperamos que las cifras de paro mejoren». El hecho de que el mercado inmobiliario no dé síntomas de recuperación, unido a la situación del sector público, la balanza comercial exterior y la subida de los tipos de interés dio pie a Iturbe para prever un 2011 «económicamente plano».

Aseguró que las perspectivas no pueden ser demasiado halagüeñas y menos en un escenario de guerra comercial permanente que está abocando a las entidades a un deterioro de márgenes y resultados. Iturbe pintó aún más nubarrones al señalar que en los últimos meses se está notando un leve incremento de la morosidad, «que tememos continúe».