El túnel peatonal del Antiguo será rehabilitado para evitar filtraciones

Le ha llegado la hora. El 'hermano pequeño' del túnel de El Antiguo va a ser rehabilitado. Tras la remodelación hace cuatro años de su 'hermano mayor', el de los coches, era más llamativa la necesidad de una restauración de este pasadizo peatonal bajo los jardines del Palacio Miramar. Los trabajos comenzarán la semana que viene y durarán dos meses.

Han sido varios años de darle vueltas a cómo se debería actuar y a qué materiales colocar en este túnel que a diario utilizan cientos de viandantes en su trayecto entre El Antiguo y el Centro por el paseo de La Concha. La concejala de Vías Públicas, Ana Rivilla, explicó que estuvieron pensando colocar materiales más nobles, tipo piedra artificial, pero finalmente descartaron la idea porque su mantenimiento sería muy costoso y con malos resultados cada vez que se tuviera que limpiar de grafitis. No es este el único problema: la bóveda sufre desde siempre filtraciones de agua de los jardines ubicados en la parte superior que afean continuamente el aspecto del túnel. «Hace dos años se pintó pero ya tiene chorretones otra vez», explicó la concejala.

Finalmente se ha optado por una impermeabilización interna por medio de una malla de polietileno que canalizará el agua de las filtraciones hasta la cuneta de la parte baja, en su encuentro con el suelo. Por encima de este material se colocará mortero hidrófugo que en la parte de la bóveda tendrá «un proyectado de piedra artificial». Las paredes verticales del túnel serán revestidas de unas placas de material porcelánico de 1,2 x 0,60 metros, de color blanco sucio, que no serán totalmente lisas sino que tendrán dibujadas en relieve unas ondas marinas.

En el encuentro de la pared y la bóveda se colocará una cenefa metálica de color oscuro que, como dictan las normas de accesibilidad, servirá para orientar a las personas que no son totalmente invidentes.

El viejo pavimento del suelo del pasadizo, único tramo entre La Perla y el Tenis que no ha sido renovado en décadas, será totalmente reemplazado por la tradicional baldosa hexagonal tipo San Sebastián. Esta renovación de la acera se extenderá 50 metros fuera del túnel hasta el encuentro del paseo de La Concha con el túnel grande (el de vehículos).

Los trabajos han sido encargados a UTEASO, las empresas que realizan el mantenimiento de las aceras de la ciudad, con un presupuesto de 124.915 euros y un plazo de ejecución de dos meses. Ana Rivilla señaló que las obras comenzarán la semana que viene y, por tanto, estarán concluidas a finales de marzo o comienzos de abril.