Medidas «extraordinarias» para custodiar los exámenes

Junto a los responsables del Servicio Vasco de Salud, ayer tomó la palabra en el Parlamento la directora del Instituto Vasco de Administración Pública (IVAP), Maite Iruretagoiena, otra de las entidades que están en entredicho en esta OPE. La directora del instituto aprovechó su intervención para detallar con precisión en qué ha consistido exactamente su labor en este caso.

Osakidetza y el IVAP firmaron la «encomienda de gestión» para la realización de esta OPE el 26 de enero de 2018. Un acuerdo que incluía tres tareas: la «elaboración de los exámenes teóricos de respuestas alternativas, tanto en euskera como en castellano, la creación de los modelos de las pruebas de acreditación de perfiles lingüísticos y la edición y transporte del número de ejemplares necesarios para la realización de los exámenes teóricos». De este modo, el IVAP confeccionó exámenes teóricos para 86 especialidades y se «manejaron más de 9.000 preguntas diferentes».

Aunque el IVAP colabora con numerosas administraciones en la elaboración de pruebas selectivas, muchos procesos convocados por Osakidetza eran de un ámbito de conocimiento «no habitual» para este instituto. «Tuvimos que extremar las medidas de seguridad en el proceso de elaboración de las pruebas, asegurando la trazabilidad del proceso y reduciendo al máximo el número de personas intervinientes en el mismo», dijo. Por todo esto, el IVAP se encontró ante «la necesidad de conciliar la confidencialidad, su guarda y custodia hasta el día de los exámenes, con la necesidad de contar con personal externo y no habitual del instituto».

Ante esta situación, el IVAP diseñó un procedimiento novedoso al que dotó de medidas de seguridad, «extraordinarias y especiales». Además, «se creó un equipo de 4 personas para la gestión de todo el proceso; se contactó con 141 personas para la elaboración de las 9.000 preguntas y se coordinó con EJIE, la Sociedad Informática del Gobierno Vasco, un operativo de seguridad informática específico para esta OPE».

Iruretagoiena recalcó que, además, siguiendo los protocolos de seguridad, guarda y custodia, las cuatro personas responsables del IVAP remitieron a los expertos la documentación por correo electrónico seguro. «En el propio mail de envío, el IVAP reiteró por escrito a las personas expertas una serie de requisitos como advertencia de confidencialidad». Por último, recordó que «ningún miembro de ningún tribunal accedió a los exámenes hasta dos horas antes de realizar las pruebas».