Euskadi, una isla entre comunidades que ya han anunciado su reapertura

Los dirigentes de las comunidades autónomas vecinas coinciden: sin estado de alarma decaerá también el confinamiento perimetral. La última región en pronunciarse fue ayer Castilla y León. El Gobierno Vasco, no obstante, ha mantenido en todo momento que su intención es seguir con las restricciones hasta que la tasa de incidencia del coronavirus baje sustancialmente. Si finalmente Euskadi se suma a las comunidades vecinas, ya sea por decisión del Gobierno Vasco o por imperativo judicial, a partir de las 00.00 horas del domingo la limitación de movilidad de las personas quedará también anulada en el País Vasco.

Navarra, una de las comunidades autónomas que más conexión tiene con Gipuzkoa debido a su cercanía geográfica, lleva cerrada desde el pasado 22 de octubre. Casi siete meses en los que cruzar la muga solo ha sido posible legalmente con un justificante de trabajo o médico, por ejemplo. Sin una razón de peso no se ha podido ir a la Comunidad Foral y viceversa. A pesar del levantamiento del confinamiento, sin embargo, el Ejecutivo de María Chivite ha decidido continuar con otras restricciones. Se recomendará limitar las reuniones en los domicilios a un máximo de seis personas de dos unidades convivenciales, y se permitirá ampliar a las 22.00 el horario de las terrazas en hostelería. En cualquier caso, pedirá mantener la limitación de la movilidad entre las 23.00 y las 6.00 horas.

De este modo, el resto de medidas se mantienen como en la actualidad, plasmándose las novedades en una Orden Foral de la consejera de Salud que entrará en vigor a las 00.00 horas de este domingo -cuando decaiga el estado de alarma- publicándose en el Boletín Oficial de Navarra. Estarán vigentes hasta el día 20 de este mes, inclusive, según explicaron ayer el portavoz del Ejecutivo, Javier Remírez, y la consejera de Salud, Santos Induráin. Las nuevas medidas deberán ser avaladas por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra.

De forma paralela, el Gobierno de Navarra trabaja en una planificación para la reapertura progresiva de los establecimientos de hostelería y otras actividades, junto con los representantes del sector. Ayer mismo se reunió con ellos.

Cantabria fue la primera en tomar la decisión. Su presidente, Miguel Ángel Revilla, ya adelantó el martes que levantará el cierre perimetral de la comunidad y además decaerá el toque de queda en la región. Sin embargo, al igual que en Navarra, las restricciones no desaparecerán de la noche a la mañana. El Gobierno de Revilla obligará a cerrar a la hostelería a las 22.30 tras el fin del estado de alarma después de que Salud Pública asegurara ayer que la desaparición del toque de queda y del cierre perimetral «es una faena».

A la espera de lo que resuelvan los fallos judiciales, Cantabria prolongará durante las próximas dos semanas las medidas restrictivas que no decaen con el estado de alarma. Es decir, se mantiene el cierre de todo tipo de establecimientos, también los de hostelería, a las 22.30 horas, si bien a partir de entonces los ciudadanos podrán seguir en la calle y no tendrán la obligación de acudir a sus hogares. Como alternativa al cierre perimetral Cantabria no descarta aislar municipios, regiones o barrios con una alta tasa de incidencia porque, según Salud Pública, «se puede hacer sin pasar por un juez». En estos momentos preocupa Castro Urdiales, que ayer llegó a los 603 casos por 100.000 habitantes.

La Rioja también levantará el cierre perimetral y el toque de queda aunque seguirá tomando medidas en función de la incidencia del virus. «La intención es que, a medida que avance la campaña de vacunación, iremos controlando la pandemia y retirando las medidas en función de los indicadores», explicó ayer la portavoz del Gobierno de La Rioja, Sara Alba, tras presentar el nuevo Plan de Medidas según Indicadores que entrará en vigor el domingo a las 00.00 horas y que contará con tres niveles y uno más intensificado.

De momento, en el nuevo Plan de Indicadores no se contempla la apertura del ocio nocturno ni la consumición en barra en los bares, pero sí se apuesta por una relajación de las medidas actuales. Por ejemplo, en cuanto al número de comensales por mesa o al número de personas que pueden reunirse, que pasará a ser solo una recomendación en vez de una obligación como hasta ahora, cuando solo se permitía un máximo de seis personas juntas.

Castilla y León se sumó ayer al resto de comunidades limítrofes con Euskadi y confirmó la eliminación del toque de queda y del cierre perimetral a partir del domingo. Pese a su decisión, el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, tildó de «negligencia» y «abandono» la actitud del Gobierno central con las comunidades. «No hay grieta jurídica en el armazón jurídico», aseguró Fernández Mañueco ayer, por lo que no ve «ningún tipo de viabilidad jurídica» a estas restricciones.

«El Gobierno de España no ha hecho los deberes, debería haber aprobado una legislación intermedia entre la ordinaria y el Estado de Alarma, que el domingo queda sin efecto, por lo que cesa el toque de queda y el cierre perimetral», insistió el presidente de Castilla y León, que aboga por continuar con ciertas medidas para evitar la expansión del virus.