La jueza imputa a otras cuatro personas por el caso de fraude en la OPE de Osakidetza

Asimismo, la jueza ha admitido a varios testigos propuestos por la central, entre ellos el exdirector de RRHH de Osakidetza, que fue «el artífice del acuerdo para la OPE 2016-17» y una de las opositoras que aprobó con la nota más alta, al parecer, gracias a la filtración de los exámenes. El martes que viene comparecerá también como testigo José Muñiz Fernández, profesor de la universidad de Oviedo encargado de realizar el estudio psicométrico encargado por la consejería de Salud para analizar las posibles irregularidades en la OPE.

Desde LAB insisten asimismo en imputar a miembros de la dirección de Osakidetza, a los que considera responsables de «generar las condiciones óptimas para que las filtraciones se diesen y en caso de la existencia de denuncias, silenciarlas y ocultarlas para que quedasen impunes». Entre ellos estarían el exconsejero Jon Darpón, que dimitió en marzo de 2019 por la presión del escándalo y María Jesús Múgica, la que fue directora general de Osakidetza que dimitió en noviembre de 2018. La central les considera culpables de los delitos de asociación ilícita, revelación de secretos y fraude en la contratación. No obstante la jueza instructora del caso aún no se ha mencionado al respecto.

El escándalo por las OPE fraudulentas de Osakidetza estalló el 30 de mayo de 2018, cuando el cirujano José María de Egaña Barrenetxea, del Hospital Universitario Donostia, remitió en escrito a a Osakidetza en el que hablaba de resultados «insólitos» en su especialidad. Las sospechas en otras especialidades fueron aflorando y los sindicatos ELA, LAB y ESK ya hablaron de «opacidad» e «irregularidades».

La investigación comenzó con la apertura de expediente sobre cuatro especialidades. Pero con el paso de los meses fueron aflorando irregularidades en muchos exámenes. Actualmente, la Justicia investiga los exámenes de 19 especialidades médicas de la OPE 2016/2017, la segunda mayor convocada por Osakidetza, en la que se ofertaban un total de 3.335 plazas y a la que se presentaron 72.500 personas.

La Fiscalía general del País Vasco elaboró un informe, tras recibir las denuncias de los sindicatos ELA, LAB y ESK, en el que hablaba de «revelación de secretos» en las pruebas y señalaba a varios jefes de servicio imputados en la causa. Estos redactaron los exámenes de sus respectivas especialidades (Anestesia, Angiología y Aparato Digestivo), y las mejores notas en los exámenes las obtuvieron compañeros de sus respectivos servicios. No obstante, ahora la sospecha está sobre otros ocho imputados más.

Este escándalo en el proceso selectivo de Osakidetza causó una importante crisis en el Gobierno Vasco y provocó divisiones y salidas en cascada. Actualmente, no hay ningún miembro ligado a la gestión de la OPE en la plantilla del Ejecutivo.