La Selectividad vasca mantendrá por tercer año consecutivo el 'modelo pandemia'

Los ministerios de Educación y Universidades han decidido repetir este formato y el Departamento de Educación avala esta decisión, tal y como ha quedado claro tras las declaraciones este martes del consejero Jokin Bildarratz: «Los alumnos que en junio de 2023 se van a presentar a la EBAU hace dos años estaban en primero de Bachillerato. Hay razones para seguir con el mismo criterio. Es adecuado que unos alumnos que han vivido una situación excepcional también puedan hacer la EBAU adecuada a esa situación que han vivido», ha señalado el titular del área tras la celebración del Consejo de Gobierno.

La prueba se celebrará como es habitual a principios de junio -las fechas concretas están aún por determinar-. Aunque el Gobierno central marca las directrices comunes, cada comunidad autónoma determina el número de preguntas y los contenidos. En Euskadi es la UPV/EHU la encargada junto a Educación del diseño y organización de los exámenes, que repetirán la estructura de los últimos dos cursos, de manera que se ofrecerá a los estudiantes un mayor número de opciones de preguntas y podrán elegir cuestiones de los modelos A y B de los ejercicios en lugar de seleccionar solo uno de ellos. En la práctica, un examen más flexible que aumenta las opciones de aprobado.

En la orden aprobada por ambos ministerios, que regula la evaluación de Bachillerato para el acceso a la universidad en este curso, la medida se justifica porque el «alumnado que realizará la prueba de acceso a la universidad en el verano de 2023 ha cursado gran parte de su escolarización con restricciones y ha tenido que sortear dificultades que deben seguir teniéndose en cuenta a la hora de diseñar esta prueba«. Por ello, los departamentos que dirigen Pilar Alegría y Joan Subirats consideran que es »recomendable mantener el diseño y las características del modelo de prueba de evaluación de Bachillerato que viene aplicándose desde el curso 2019-2020, con el objetivo de evitar incertidumbres en la comunidad educativa y solventar posibles situaciones de desigualdad entre el alumnado que debe realizar este modelo de prueba por última vez en el presente curso y los que lo hicieron en las convocatorias inmediatamente anteriores«.

Pese a ser un formato más sencillo, en la última edición de la EBAU en el País Vasco, crecieron de forma ligera los suspensos. Un total de 288 alumnos de los 11.905 que se presentaron no lograron aprobar. Una cifra que redujo la tasa de aprobados hasta al 97,62, un punto más baja que la del año anterior.

Las pruebas del próximo curso, según establece el documento, contendrá preguntas abiertas y semiabiertas que requerirán del alumnado capacidad de pensamiento crítico, reflexión y madurez. Además de estos tipos de preguntas, se podrán utilizar también preguntas de opción múltiple, siempre que en cada una de las pruebas la puntuación asignada al total de preguntas abiertas y semiabiertas alcance como mínimo el 50%.

La preguntas de opción múltiple tendrán «una sola respuesta correcta inequívoca y no exigen construcción por parte de los estudiantes, ya que este se limitará a elegir una de entre las opciones propuestas». Por su parte, las semiabiertas serán preguntas «con respuesta correcta inequívoca y que exigen construcción por parte del alumnado», una construcción que «será breve, por ejemplo, un número que da respuesta a un problema matemático, o una palabra que complete una frase o dé respuesta a una cuestión, siempre que no se facilite un listado de posibles respuestas».

Por otro lado, el Gobierno vasco sigue destinando más fondos para digitalizar a los centros públicos en el marco del Plan de Transformación Digital del Sistema Educativo vasco. El Consejo de Gobierno ha aprobado este martes una nueva partida de 54,4 millones destinada a la compra de material informático para alumnos y profesores y equipamiento necesarios para configurar aulas digitales, como pantallas interactivas, ordenadores portátiles y de sobremesa, cámaras web de aula, micrófonos inalámbricos de aula o personales, cámaras de documentos, tabletas digitales o armarios de carga. En este sentido, ha señalado que durante este 2022 se ha conseguido el objetivo de dotar de ordenador o tablet a todo el alumnado de primero, segundo y tercero de Primaria. En total, 1.802 aulas. El próximo año el Departamento continuará con el resto de niveles de Primaria y la ESO.

Asimismo, el Departamento de Educación del Gobierno Vasco destinará 29,3 millones de euros para la contratación de itinerarios de transporte escolar de los centros públicos de Álava y Bizkaia. El Consejo de Gobierno ha acordado autorizar la contratación del servicio escolar para diversos itinerarios con vehículos de una capacidad superior a nueve plazas incluida la del conductor.

Este servicio será destinado al alumnado de Educación Infantil, Primaria y ESO. En el caso de Bizkaia el importe asciende a 18.634.944 euros para lacontratación de 199 itinerarios. En este territorio son transportados diariamente 7.614 alumnos que estudian en 102 centros públicos. El Gobierno ha precisado que, debido al elevado número de itinerarios a licitar, y con el objetivo de facilitar el acceso a las pymes a la contratación, los expedientes de contratación se licitan por territorios. La licitación correspondiente a Gipuzkoa se aprobará durante las próximas semanas.

Otras partidas aprobadas por el Consejo de Gobierno beneficiarán a los alumnos becados. El Consejo de Gobierno ha autorizado aprobar en 8 millones de euros el importe para la financiación de la convocatoria de becas y ayudas al estudio para la escolarización de estudiantes de niveles no universitarios para el curso académico 2022-2023, de manera que los beneficiarios recibirán una ayuda complementaria de 400 euros.

La ampliación de esta subvención se suma al importe de la convocatoria de becas del Departamento de Educación para el presente curso, aprobada el pasado 14 de junio y que ya cuenta con un importe de 62,5 millones de euros. El pasado curso 2021-2022 fueron beneficiarios de la convocatoria de becas y ayudas al estudio en niveles no universitarios del Departamento de Educación un total de 115.182 alumnos. De ellos, 19.671 fueron estudiantes de etapas postobligatorias.