Balance de la Semana Grande

Carmen, como otros muchos donostiarras, no se ha obsesionado con participar en todas las actividades del programa y ha preferido una Aste Nagusia tranquila, «dando un paseo, tomando un vino, con una tarde familiar en la playa...» Aun así, no se ha perdido los fuegos, aunque los ha visto en la televisión, porque «una vez me meto en casa me da pereza salir a verlos, pero por lo que he visto y he oído han sido muy bonitos». En su opinión, ha sido una Semana Grande «muy decente, todo ha ido muy bien». Uno de los aspectos que le ha llamado la atención ha sido la gran cantidad de gente, «la mayoría extranjeros, sobre todo franceses e italianos».

Esta cuadrilla de jóvenes donostiarras ha pasado los últimos días inmersa en la programación de Aste Nagusi Pirata, que tampoco este año les ha decepcionado. Se han perdido muy pocas de las actividades programadas en la Flamenka, el muelle y alrededores. El viernes, por ejemplo, se preparaban para participar en unos juegos entre cuadrillas a los que tenían que ir disfrazados, inspirándose en un programa de televisión. Habían elegido los Looney Tunes. Está claro que hay distintas maneras de vivir la Aste Nagusia, pero a la hora de hacer balance todos coinciden en que la de este año ha sido una gran edición.

Katerina y David, una pareja italiana que llegó el jueves a San Sebastián, no tardó en zambullirse de lleno en el ambiente festivo. Y, desde luego, han cumplido con todos los ritos: vieron los fuegos, bailaron en el Boulevard, tomaron un helado... Lo hicieron en ese orden. Les sorprendió la calidad de los fuegos valencianos de Pirotecnia Turis. Tras el espectáculo, se fueron directos al concierto de Puro Relajo y disfrutaron con las rancheras, los corridos y los temas latinos del quinteto navarro. Como muchos de los miles de visitantes de otras nacionalidades que han vivido la fiesta donostiarra estos días, el balance que realizan es claramente positivo.

Imanol Zabalegi está obligado a combinar trabajo y fiesta. Es director de Relaciones Públicas del catamarán Ciudad San Sebastián, por lo que es «uno de los pocos privilegiados que han tenido la posibilidad de ver todos los fuegos desde la bahía». Admite que la mala climatología que ha obligado a suspender algunas actividades ha causado algún inconveniente, pero en términos generales «todo ha ido bastante bien». Ha habido mucha gente «tanto de aquí como de fuera», pero la gran afluencia no ha tenido ningún efecto negativo ni en él y ni en la fiesta. «Ha habido un buen ambiente», destacaba. Y, en el fondo, a la hora de valorar una fiesta es de lo que se trata.

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