Decenas de personas protestan contra el cierre del punto de refuerzo de Amara Berri

Decenas de personas, tanto usuarios como trabajadores sanitarios, se han concentrado esta mañana ante el ambulatorio de Amara Berri, en Donostia, para protestar por la decisión de Osakidetza de cerrar este centro de salud como punto de refuerzo durante los fines de semana y días festivos, un cierre que se hará efectivo «a mediados de diciembre» y que derivará a los pacientes al ambulatorio de Gros. La plataforma DOPA (Donostialdea a favor de la sanidad pública) había convocado una concentración de denuncia para este sábado a las 10.00 horas y ha conseguido congregar a decenas de personas a pesar de las malas condiciones meteorológicas. ante el ambulatorio de Amara una concentración de protesta ante la decisión de Osakidetza.

La plataforma DOPA ha denunciado que «el cierre del PAC de Amara Berri que se ofrecía durante fines de semana y festivos se suma a los innumerables recortes de servicios sanitarios públicos que el Gobierno Vasco viene llevando a cabo, y va a afectar a miles de donostiarras que, a partir de ahora, se van a ver obligados a tener que desplazarse a otro PAC más lejano». Los concentrados sujetaban dos pancartas: una de DOPA en la que se podía leer 'Murrizketarik ez. Ez udan ez neguan' (no a los recortes, ni es verano ni en invierno'). Y otra en la que se pedía que no se cierre «el PAC de Amara Berri».

Los convocantes han indicado que este cierre supone «una nueva vuelta de rosca al empeoramiento de los servicios sanitarios públicos que además se realiza cobardemente, sin informar previamente a la población, y paradójicamente, en pleno proceso de elaboración del Pacto Vasco sobre Salud, supuestamente dirigido a mejorar la situación de Osakidetza».

El ambulatorio de Amara Berri funcionaba hasta ahora como un punto de refuerzo los fines de semana y días festivos para descargar de trabajo al Hospital Donostia y desarrollar algunas actividades sanitarias no agudas, pero Osakidetza ha decidido que deje de funcionar como tal a partir de «la segunda quincena de diciembre». Fuentes del Departamento vasco de Salud apuntan a la «baja demanda» asistencial que registraba este punto de refuerzo y a la «falta de médicos» como las principales razones que han llevado a esta «reorganización de recursos», que conlleva que los pacientes que se atendían en Amara Berri se deriven a partir de ahora al ambulatorio de Gros.

El sindicato ELA fue quien levantó la liebre este viernes al denunciar en un comunicado que Osakidetza «cerrará el PAC de Amara Berri», lo que «dejará sin punto de atención continuado los sábados, domingos y festivos a los barrios de Amara Berri, Antiguo, Riberas de Loiola, Aiete, Loiola, Martutene y Miramon». Fuentes de Osakidetza han confirmado a este periódico que, efectivamente, el centro de salud de Amara Berri dejará de abrir los fines de semana desde mediados de diciembre, aunque puntualizan que este ambulatorio «no venía funcionando como un PAC (punto de atención continuada), como dice ELA, sino como un punto de refuerzo».

En paralelo al cierre del punto de refuerzo de Amara Berri, Osakidetza anuncia que «se reforzará Gros con una enfermera más (es decir, estarán tres los fines de semana y festivos) y con una celadora más (estarán dos)». Las mismas fuentes explican que «la actividad que tienen estos puntos de refuerzo es, por un lado, la programada de enfermería (curas e inyectables) y, por otro, las 'citas día'. Con esta reorganización seguirá realizándose con normalidad toda esta actividad programada y está garantizada la asistencia sanitaria a las personas que lo soliciten, ya que desde todos los centros de salud de Donostia citarán todas las actividades programadas en Gros, y se comunicará mediante carteles en los centros de salud que tienen como referencia Amara Berri, que si lo necesitan, serán atendidos en Gros o en el PAC Donostia», ubicado en el cuarto de socorro de la calle Bengoetxea, en el centro de la ciudad.