Los técnicos forales del Servicio de Patrimonio Histórico documentan el hallazgo. A.M.

La 'costilla' de un barco sale de la arena de Ondarreta

La erosión de la playa donostiarra por las mareas deja al descubierto, junto al muro del Tenis, la cuaderna de una antigua barcaza

Aingeru Munguía

San Sebastián

Miércoles, 7 de agosto 2024, 06:28

Todos los veranos, la playa de Ondarreta nos muestra alguno de los tesoros que esconde bajo la arena. Esta temporada ya ha sonado la campana, ... gracias a las mareas vivas y a la fuerte erosión que sufre su orilla más occidental. La Sociedad de Ciencias Aranzadi descubrió el lunes un extraño tronco de madera en medio de las piedras que afloraron con la primera bajamar, algo que enseguida llamó la atención de sus arqueólogos quienes avisaron al Servicio de Patrimonio Histórico de la Diputación. Según estos, la pieza de madera encontrada de 3,6 metros de longitud es «la cuaderna» de un antiguo barco.

Publicidad

Esta 'costilla' «parece corresponder a la de una barcaza de fondo plano que se utilizaba para navegar durante la pleamar por zonas de poco calado de la regata de Igara. Normalmente, estas embarcaciones transportaban arena o material de construcción, ya que el desplazamiento era más sencillo que en carro», explica Mertxe Urteaga, arqueóloga del Servicio de Patrimonio de la Diputación que ha estado al frente del operativo.

«Hay que tener en cuenta, que hubo una época en que las embarcaciones podían llegar hasta Correos, en Igara, o el Caserío Portuetxe». Respecto a la fecha a la que podría corresponder dicha pieza, Urteaga defiende que es preciso esperar a los análisis que se realicen, ya que «esta arteria de navegación estuvo operativa hasta principios de siglo XX».

Este miércoles, sobre las 13.00 horas y aprovechando la bajamar, se ha procedido a su traslado al Centro de Colecciones Patrimoniales Gordailua, en Irun, para su análisis. Una vez allí, el primer paso será limpiar la cuaderna de forma superficial, y posteriormente, se introducirá en una piscina para evitar el deterioro del material. «La madera está saturada de agua, y si se deja fuera, pierde su forma y termina rompiéndose, por lo que queda inservible. El objetivo es encontrar si hay alguna huella del instrumental con el que se talló. Esto nos dará datos de la cronología. Y si fuera posible, después recurriremos a la dendrocronología… Es un proceso tedioso», ha aclarado Urteaga. En este sentido, ha añadido Giorgio Studer, restaurador del Servicio foral de Patrimonio, que «el proceso de desalinización en la piscina es largo» y que, de hecho, el «proceso completo puede prolongarse dos, tres o hasta cuatro años».

Publicidad

Aranzadi avisó a la Diputación y el Servicio de Patrimonio Histórico documentó este martes el descubrimiento

La arena de Ondarreta es una auténtica fuente de información del uso que se ha dado a este lugar durante siglos y las construcciones que se levantaron en esta zona de San Sebastián durante el último siglo y medio. Donde hoy ponemos la toalla para tostarnos al sol en su día hubo un campo de instrucción militar, campeonatos de hípica, hubo una pista de aterrizaje de avionetas, una cárcel... incluso fue el escenario del primer campo de fútbol de la Real Sociedad. El movimiento de la arena nos ha recordado esta semana que Ondarreta fue antaño también una zona navegable por barcos o barcazas que subían hasta Añorga e Ibaeta por la regata del Gorga.

Era el mediodía del lunes y Jon Etxezarreta, biólogo de Aranzadi y experto en todo lo concerniente a la playa de Ondarreta, examinaba la zona más próxima al muro del Tenis, donde el mar ha descubierto este verano más piedras que de costumbre. Hasta tal punto ha sido la erosión, es decir el traslado de arena por parte del mar, que la cimentación construida el año pasado para evitar el descalce del muro de costa ha quedado este verano al descubierto. La 'fuga' de esta arena ha tenido un destino claro: el Pico del Loro, una zona de la bahía que este verano aparece inundada de arena como no se había visto en décadas.

Publicidad

La combinación de transporte de arena y mareas vivas ha dejado la parte occidental de la playa de Ondarreta al descubierto, lo que permite este verano ver lo que ha estado ahí siempre pero que permanecía oculto por el sedimento. Tras recibir las primeras fotos del hallazgo, el arqueólogo de Aranzadi Alfredo Moraza sospechó que el descubrimiento correspondía a una de las 'costillas' o «cuaderna» de un antigua barcaza por lo que puso el hecho en conocimiento del Servicio de Patrimonio Histórico de la Diputación de Gipuzkoa.

Documentar el hallazgo

Tres técnicos se desplazaron este martes a mediodía a la playa para documentar la pieza, que apareció en la zona intermareal a pocos metros del muro de costa. El trabajo consistió en eliminar la arena de alrededor y el agua para medir el elemento y sacar fotografías. Su longitud es de 3,6 metros de punta a punta. En uno de los extremos se aprecia un agujero por donde previsiblemente se introducía un elemento metálico para 'atar' esta cuaderna a la siguiente para conformar uno de los soportes estructurales de la embarcación.

Publicidad

Las cuadernas son las 'costillas' transversales del esqueleto de un barco, como se ve en la ilustración de la Nao San Juan que se construye en Albaola. La unión de estas piezas forman una 'U' que constituye la sección que da forma al barco. La cuaderna más ancha, que suele estar situada en el centro de la embarcación, se llama cuaderna maestra. Se desconoce de momento a qué tipo de embarcación podría pertenecer y su antigüedad, algo que se irá revelando conforme avance la investigación.

Hay que tener en cuenta que este punto de la hoy playa de Ondarreta era donde antaño desembocaba la regata del Gorga que traía sus aguas desde Añorga e Ibaeta, una zona que fue navegable durante siglos –en Igara pervive hoy el caserío Portuetxe, cuyo nombre expresa bien que se navegaba por esta zona hasta llegar al mar–.

Publicidad

Regatas navegables

Ondarreta no ha sido solo zona de desembocadura de varias regatas navegables, como hoy nos revela el movimiento de su arena. La actividad mareal nos ofrece cada verano un capítulo histórico de las actividades que allí se han desarrollado en los últimos siglos. Las hoy desgastadas piedras que nos descubre cada marea son restos de las sucesivas construcciones que ha tenido este lugar de San Sebastián. En primer lugar, la cárcel, construida entre 1886 y 1889 y demolida con explosivos en 1949-1950. Parte de sus sillares se utilizaron para construir la iglesia interior del Seminario, pero buena parte de estos restos pétreos quedaron diseminados en la arena al albur del mar.

Antes que la cárcel hubo en la zona un campo de maniobras militares que fue posible gracias a un imponente de relleno de piedras en lo que hoy es media playa. Esta infraestructura fue abandonada con la reubicación de los militares en Loiola y la fuerza del mar hizo su trabajo, primero demoliendo el muro de costa y diseminando parte de las piedras de este relleno, que fueron quedando bajo la arena.

Noticia Patrocinada

Restos de actividades

Ondarreta fue escenario también de un concurso hípico entre 1902 y 1911, parte de cuyos restos también han ido apareciendo estos años entre los cascotes que emergen en la bajamar. Los asiduos a la playa también pueden ver cíclicamente restos de lo que fueron varios pasillos de transporte por los que discurríeron vagones o carros tirados por bueyes con distintos objetivos: transportar piedras de las canteras que hubo en Igeldo, efectuar el transporte de arena para urbanizar la las primeras villas que se construyeron en la zona, incluso railes para mover hasta el mar las casetas de baño de las distinguidas señoras de la Belle Epoque.

La vigilancia a la que se somete a la playa para controlar la aparición de piedras permitió el hallazgo el lunes

Más recientemente, de la arena de Ondarreta se han sacado piezas de mármol que han formado parte de la construcción del propio paseo, incluso una pieza tallada del bordillo de las escaleras de bajada a la playa.

Publicidad

La vieja cuaderna náutica descubierta el lunes fue este martes cubierta de arena tras ser documentada en espera de que a lo largo de las próximas horas, previsiblemente a lo largo del miércoles, sea sacada de la playa mediante un camión grúa hasta el paseo para continuar con su investigación.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad