No hay vendaval que frene al líder

Decía Coudet en la víspera del partido que la Real es un candidato al título de Liga. No sé si el argentino quería alegrarnos los oídos o lo pensaba realmente. Aunque ahí queda grabado y quizás en mayo haya que recordarle que fue el primero en advertir semejante circunstancia. Porque cuando un equipo acaba venciendo con autoridad fuera de casa después de ser superado durante cerca de una hora por un Celta que mereció marcar varios goles, es que algo tiene. De momento, es líder en solitario con tres puntos de ventaja sobre Real Madrid, Sevilla y Betis.

La Real se ha convertido en una máquina de ganar. Lo hace jugando con diez, cuando el contrario es mejor, remontando resultados... Son ya trece encuentros seguidos sin conocer la derrota y una semana más en lo alto de la tabla. El vestuario sigue transmitiendo el mensaje de cautela y tranquilidad, de que esto es muy largo, pero aquí se está cociendo algo muy gordo. Y ahí lo dejo...

En Balaídos, un campo que cada año nos devuelve un trocito de aquella felicidad que nos quitó en 2003, aguantó en pie la lluvia y el vendaval durante una hora gracias a un Ryan que cuajó la mejor actuación de un portero de la Real en años con hasta cinco intervenciones de mérito en los primeros 55 minutos. Después bastó que se juntaran Portu, Januzaj e Isak para tomar ventaja en el marcador y que el cuadro de Imanol sacara petróleo de un córner para sentenciar. Así han ganado los grandes muchas veces y así lo hace ahora una Real que es uno de ellos.

Recital de Ryan. La gran sorpresa en la alineación fue la entrada del portero australiano en lugar de un Remiro que estaba en buena línea. Imanol quiere tener a los dos porteros activados para que uno no se duerma y el otro no baje los brazos, de forma que le concedió la segunda titularidad del curso después de la de Granada, también en otro partido de Liga entre semana. Y Ryan le devolvió la confianza con un partidazo. A ver quién le quita ahora en el derbi...

El resto del once se asemejó bastante al equipo tipo, con la presencia de Zaldua y Aihen en los laterales y Aritz por Zubeldia junto a Le Normand en el eje de la zaga. En el centro del campo jugó Zubimendi como pivote después de recuperarse de sus molestias en el piramidal que le impidieron estar en el Wanda, con Merino y Silva por delante. Arriba el técnico recuperó la figura de los dos extremos, con Januzaj y Portu a pierna cambiada, y un punta que volvió a ser Isak.

En el Celta Coudet calcó el mismo once que goleó el lunes en Getafe, siguiendo ese viejo refrán en el fútbol de que no tocar lo que funciona, pero quizás se le hizo demasiado largo el partido por el esfuerzo acumulado.

El Celta arranca con más balón. El cuadro local empezó con más ímpetu que la Real porque su primera presión adelantada le daba sus frutos. Eso hizo que los de Imanol entraran poco en contacto con el balón y se sintieran incómodos. A la media hora el conjunto vigués doblaba el número de pases en campo contrario de los realistas.

Por otra parte, la posición flotante de Denis Suárez, descolgándose desde la mediapunta hacia Beltrán permitía al fino futbolista gallego liderar el juego de los suyos en el centro del campo. Además de repartir, también llegaba al área porque su ubicación era difícil de detectar. No es extraño que las dos mejores ocasiones antes del descanso fueran suyas. La primera en el minuto 5 tras un centro raso de Mallo, aunque Ryan estuvo atento para aguantarle de pie y desviar su remate. La segunda en el 44 con otra mano derecha que sacó el meta australiano. Pocas veces se ve algo así, pero la Real perdía el centro del campo y eso le obligaba a jugar más retrasada que de costumbre. No estuvo cómoda hasta el descanso.

El recurso del contragolpe. Sin poder superar la presión celtiña, la alternativa pasaba por recuperar algún balón en la zona ancha para correr el contragolpe. Una buena opción llegó tras una incursión rápida de Portu por la izquierda con último pase de Silva para Januzaj, pero el disparo del belga se fue demasiado cruzado. Poco después fue Merino, tras dejada de Silva, el que metió un pase en largo para la carrera de Isak pero su disparo al primer poste se lo adivinó Dituro. El sueco hacía daño en su duelo con Murillo.

A la media hora la Real se estiró algo porque Zubimendi y Merino consiguieron juntarse algo más y conectar con los compañeros de las líneas posteriores. Un centro de Januzaj a pierna cambiada lo ganó Merino en el segundo poste pero su pase de la muerte a Silva lo interceptó Aidoo. Fue un espejismo porque los últimos minutos antes del descanso el Celta redobló su presión y Ryan tuvo que firmar una doble parada magnífica ante Denis y Mina. Valió más de medio partido.

Mejoría tras el descanso. El Celta salió pisando el acelerador pero se topó de nuevo con Ryan. Sin embargo, al conjunto local le costaba mantener la frescura en la presión y la Real empezó a enlazar secuencias de pase. Así, en el minuto 53, tras una recuperación en el área propia a la que Merino dio sentido se inició la jugada clave que desembocó en el 0-1. Portu terminó metiendo al espacio y Januzaj probó suerte ante Dituro para que rebañase Isak. El VAR confirmó que el fuera de juego que había señalado el asistente no tenía sentido.

Pudo empatar Iago Aspas a continuación tras ganar la espalda a Le Normand pero no lo permitió Ryan. Con esa opción del de Moaña y un disparo fuera de Nolito se le acabó la fuerza al Celta. También contribuyó a ello la Real, porque Imanol cambió el dibujo pasando al 1-5-3-2 del Wanda con Le Normand, Aritz y Zubeldia de centrales, Zaldua y Aihen en los carriles, Zubimendi, Turrientes y Merino en la zona ancha y Sorloth e Isak arriba.

La consecuencia fue que tuvo más fluidez en la salida de balón y más protegida el área ante el acoso a la desesperada de los locales buscando a Santi Mina. Para no acabar sufriendo la Real sacó petróleo en un córner forzado por Lobete, colgado por Turrientes y cabeceado por Merino que desvió Aritz. El Sanse, como siempre, aportando su granito de arena. Los últimos minutos fueron para el disfrute y hasta Diego Rico tuvo la ocasión de sumarse a la fiesta con su debut oficial con la camiseta txuri-urdin. Ahora espera el derbi el domingo en el Reale Arena.

Estadísticas completas del partido: