Imanol saluda a la plantilla en la sesión de este martes en Zubieta. JOSE MARI LÓPEZ
Copa | Barcelona - Real Sociedad (21.00 horas)

Un todo o nada maravilloso

No va más para la Real en el escenario más feo que se recuerda con el enorme lastre que suponen las ausencias de Merino y Silva, lesionado este martes, para pasar a semifinales de Copa

Miércoles, 25 de enero 2023, 06:54

Le espera a la Real Sociedad un todo o nada maravilloso, en un escenario colosal. A esto nos está llevando este equipo, invicto e ... imbatido en lo que llevamos de año, rompiendo récords centenarios. A soñar y pensar en grande, como el partido de este miércoles. Tristemente se enfrenta a su pasado, ese donde no figura ninguna alegría en sus últimas treinta visitas al Camp Nou, y con dos ausencias de calado. La última, dolorosísima. David Silva no podrá ayudar al conjunto blanquiazul esta noche (21.00 horas, Movistar Liga de Campeones) en el Camp Nou. El centrocampista canario se lesionó en el sóleo en la sesión de este martes, la última antes de partir a la Ciudad Condal.

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Imanol deberá recomponer su centro del campo. Hace poco la Real navegaba bajo el yugo de Zubimendi, Brais, Merino y Silva. Los dos últimos no van a poder echar una mano a su equipo y el oriotarra tendrá que mirar en el fondo de armario. El único lunar de esta brillante temporada están siendo las lesiones. Una vez más, el equipo blanquiazul presenta un carro de ausencias –Sola, Merino, Cho, Guevara, Gorosabel, Pacheco y Silva– para un partidazo que estaba marcado en rojo. De todas formas, este equipo se está acostumbrando a firmar encuentros de leyenda y a sobreponerse a todas las trabas. Hará falta de todo y en todos los lados para pasar de ronda que puede llegar en los noventa minutos reglamentarios, en la prórroga o en los penaltis.

Batalla en la sala de máquinas

Será una incógnita hasta una hora antes, pero todo hace indicar que el puesto que deja Silva lo puede ocupar Asier Illarramendi. Luego hace falta disponerles en la zona ancha. No hay nadie con las mismas características que el canario, pero Kubo fue fichado para sustituirle en el enganche aunque luego haya jugado de delantero por las lesiones que ha habido arriba. También Navarro o el propio Marín pueden actuar ahí. Zubimendi y Brais tienen el puesto asegurado en el centro del campo y en ataque Sorloth es el principal referente. Para acompañarle se postula Oyarzabal, que fue suplente en Vallecas y aportaría carisma en ausencia de Merino y Silva, aunque Navarro en ataque viene de marcar en todos los partidos de la Copa.

En cualquier caso, el partido se puede decidir en la zona ancha. En el Barcelona, Busquets ejerce de ancla, de protector de los centrocampistas ofensivos. Si está bien, es un muro infranqueable, antes de toparte con los Koundé, Araujo o Christensen. La música la ponen los dos jovencísimos jugadores del Barça y de la selección: Pedri y Gavi. Talentoso y exquisito uno, duro y eficaz el otro. Antes de que De Jong haga sinfonía con el balón, aunque Xavi puede decantarse por un 4-3-3 más ofensivo y dejar a alguno fuera. El neerlandés tiene la mala costumbre de hacer buenos partidos contra la Real, como en la Supercopa de hace tres años, o en el partido liguero del pasado agosto. El destino de la eliminatoria puede ir por quién sale victorioso en la batalla en el centro del campo, aunque otros detalles pueden inclinar el partido a uno u otro lado. Hay que tener en cuenta, además, el escenario. Por eso William Wallace derrotó al ejército inglés en la batalla del puente de Stirling. Los escoceses no hubieran tenido ninguna posibilidad a campo abierto, sí en un paso estrecho, como el escenario de aquel enfrentamiento del siglo XIII. Y es que el Camp Nou es gigantesco. El cuentakilómetros de los centrocampistas de la Real se deberá poner a cero porque habrá que correr mucho.

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No hay que olvidar el duelo entre Lewandowski, 22 goles en lo que se lleva de temporada, y Remiro, el portero con más puertas a cero. O que la Real está defendiendo a las mil maravillas y que enfrente se va a topar con Dembélé o Raphinha, grandes dribladores. Por el lado blanquiazul está el factor Oyarzabal, que ha ido entrando poco a poco pero al que le sobran galones en estos partidos. La empresa es complicada pero la fiabilidad de la Real está fuera de toda duda.

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