A seguir disfrutando, líderes

Esto no se da muchas veces. A mí, como jugador, no me gustaban estas celebraciones previas, pues te cortan la intensidad de todo el calentamiento. Incluso se dio la circunstancia de estar parados dos minutos antes del pitido inicial. Me gusta más para después, hay que entenderlo. Y sin importar el resultado. Ha sido una pasada, una auténtica fiesta que no olvidaremos jamás.

Sobre el partido, empezamos sin Mikel Oyarzabal, nuestro líder espiritual. Al Mallorca teníamos que superar si echamos un vistazo a los precedentes. De inicio, los bermellones no nos dejaron hacer nuestro juego fluido, ellos se juntaban y presionaban bien en dos líneas de cuatro y concedían muy pocos errores. Es algo que van encontrando los rivales en nosotros y nos causa problemas en nuestro juego. Según pasan los minutos, se ve que es un partido de desgaste, de mucha paciencia. La Real es maestra en esto y sabe llevarlo. Eché, quizá, algo de menos que el balón llegara a Navarro para que hiciera de Silva y poder jugar con los puntas. Los centrales tienen que saltar líneas y no buscar tantos pases horizontales. A la media hora no habíamos lanzado a puerta. Las primera ocasión, de córner. Merino remata, como no podía ser de otra manera. Al filo del descanso, Aihen mide mal y debía ser más conservador, ya tenía tarjeta. Pero lo de Battaglia no lo entiendo, lo hubiera igualado. Pero ya sabemos cómo funciona el arbitraje aquí. En la segunda se cambian los papeles, con más posesiones largas. Ellos, más protagonistas con uno más, daban el punto por bueno. A nosotros nos representa la solidaridad como equipo. Es precioso, lo destacaría junto al coraje. El grave error de Reina nos da ese gol de Lobete. Este chico tiene mucho gol. El racaneo del Mallorca no le vale, se va de vacío. Sobre el colegiado, alguien dirá que no ha tenido influencia en el marcador, porque la Real se lleva los tres puntos. Ahora, a Graz. Cuando un equipo es grande tiene que jugar dos veces a la semana. Viajar por Europa y con la Real, es precioso. A ver si conseguimos un resultado positivo y afrontamos el del Atlético, con más moral si cabe.