El brillo ahora está en la defensa

Una hoja de servicios impecable que tiene mañana un examen: resistir en el Santiago Bernabéu. El líder destacado de la Liga no ha perdido partido alguno en su campo. De hecho el último en derrotarle fue el Levante pero la temporada pasada (1-2). En la presente campaña el equipo de Ancelotti solo ha cedido tres empates en el Bernabéu: tres 0-0 ante Villarreal, Osasuna y Cádiz; y el último una igualada ante el Elche (2-2). Además de eso es el máximo realizador de la competición con 52 tantos a favor y la Real, el tercero que menos encaja con 25. Bonito duelo y nuevo desafío para la Real si puede aguantar las embestidas de los Benzema, Vinicius, Asensio, Modric y compañía.

No hay duda de que la Real ha cambiado su libreto y que, por ahora, los resultados son parecidos a los de la campaña pasada. A estas alturas –jornada 26 de Liga– el conjunto txuri-urdin tenía un saldo de 43 goles a favor y 21 en contra. En esta temporada el resultante es un exiguo +2, gracias a los 27 goles que ha marcado por los 25 que ha encajado.

Y es que resulta extraño que a estas alturas de campeonato, el equipo de Imanol no se haya desmelenado todavía en ataque. Sus mejores registros son ante el Panadería Pulido (0-4) y en partidos de más enjundia contra el PSV Eindhoven (3-0), en el choque que cerró al liguilla de grupos de la Europa League. Por comparar con el año pasado, la Real metió tres goles a Elche, Betis y Getafe; y cuatro a Huesca, Celta, Cádiz y Alavés en partidos que se resolvieron plácidamente para la escuadra blanquiazul.

No hay duda de que el brillo esta campaña está en la portería y la retaguardia, con registros que son de lo mejorcito de Europa. De hecho con el 0-2 de Mallorca, la Real firma tres encuentros seguidos en liga sin encajar gol: 2-0 ante el Granada, 1-0 frente a Osasuna y el 0-2 del partido ante los bermellones.

Las veinte porterías a cero de este año tienen como protagonistas a Remiro, Le Normand, Aritz, Aihen, Gorosabel o Zaldua, más la aportación de Zubeldia, Diego Rico y, en los dos últimos encuentros, un sensacional Jon Pacheco. Quince de esas veinte porterías a cero se han logrado en la competición liguera, que en 26 jornadas supone un 57,6%, un porcentaje altísimo y notable que explica que la Real no se haya descabalgado de los primeros puestos en todo el curso. Tres se han logrado en Copa (Panadería Pulido, Zamora y Atlético) y dos en Europa League (Sturm Graz y PSV).

No hay duda de que el Real Madrid es temible y que sus números hablan por sí solos del potencial que tiene. Sin embargo, en los últimos encuentros su poderío goleador se ha visto mermado. Solo ha conseguido cinco tantos en sus seis últimos encuentros. Fueron en las exiguas victorias ante el Granada (1-0) y Rayo Vallecano (0-1), a las que hay que añadir el único encuentro que los merengues solventaron con rotundidad, ante el Alavés (3-0). En todo el mes de febrero, en la mitad de partidos se ha quedado sin ver puerta. El primero fue en los cuartos de la Copa, de donde quedó apeado tras caer por 1-0 en San Mamés. Después, el Villarreal le puso en apuros y no consiguió hacerle gol al equipo de Emery (0-0). El siguiente fue en la eliminatoria de la Champions League ante el PSG, donde los parisinos cercaron la meta de Courtois y donde el Madrid apenas inquietó a Donnaruma (1-0).

No cabe duda de que el reto en la avenida de la Castellana es mayúsculo para una Real que llegará sin apenas tiempo para preparar el choque. El Madrid, tres días después, se juega la temporada ante el PSG. Si los de Imanol están cerca de candar su portería, habrá opciones de puntuar.