Silva conduce el balón con el apoyo de Brais mientras Sola busca el desmarque por la banda derecha. José Mari López
Real Sociedad-Villarreal

Enamora, juega y no para de ganar

La Real Sociedad da una lección de fútbol al Villarreal, le supera con el gol de Brais y tiene ocasiones para obtener una renta aún mayor

Miguel González

San Sebastián

Domingo, 9 de octubre 2022

Qué gozada es ver jugar a esta Real Sociedad. Algún día nos daremos cuenta de que estamos viviendo una época histórica, porque esta rutina ganadora ... que llevamos durante cuatro años solo se ha dado en los ochenta y ya ha llovido. Lo que está haciendo este equipo es de sobresaliente. Da igual la acumulación de partidos y de lesiones, que en un año hasta seis jugadores hayan pasado por el quirófano, que el rival llegue más fresco... Nada importa. Ahí la tienen, empatada con el cuarto en la Liga tras haber jugado ante Barcelona, Atlético y Villarreal y liderando su grupo en Europa por delante del Manchester United.

Publicidad

Su secreto es la ambición. En los últimos años ha ido mejorándose cada vez más y uno se atreve a decir que esta versión es la más completa de todas. No porque juegue más que antes, sino porque tiene once guerrilleros con el cuchillo entre los dientes que persiguen cada balón como si fuera el último de sus vidas. La llegada de Kubo y Brais, junto con el compromiso de Silva y Sorloth y el resto de las líneas, ha desembocado en un grupo que asfixia desde arriba al contrario y le condena a pegar pelotazos sin sentido. Y eso tiene mucho mérito cuando enfrente está un Villarreal que llegaba con nueve jugadores frescos en el once mientras que la Real solo hizo dos cambios respecto a Moldavia.

La diferencia estuvo en la actitud. Cuando juegas para un escudo eres capaz de superar el 100% en la entrega y eso es oro cuando el rival normalmente juega por llenarse los bolsillos. Yo soy el Villarreal, con el plantillón que tiene, y hoy estaría muerto de vergüenza ante el repaso que le dio una Real que, en la segunda parte, debió haber conseguido una victoria más cómoda sin necesidad de sufrir tanto a mínino que hubiese aprovechado alguna de las claras ocasiones con las que contó.

Real Sociedad

Cho (Sorloth, m.73), Fernández (Silva, m.73), Le Normand (Aritz, m.80), Turrientes (Brais, m.80) y Navarro (Kubo, m.87).

1

-

0

Villarreal

Jackson (Danjuma, m.46), Morales (Yeremy, m.46), Baena (Coquelin, m.63), Mandi (Kiko Femenía, m.80) y Chukwueze (Lo Celso, m.80).

  • Gol: 1-0 min. 32: córner que despeja el Villarreal, Merino pica un pase genial por encima de la defensa amarilla y Brais bate a Rulli por debajo de las piernas.

  • El árbitro: Soto Grado del comité riojano asistido por Becerril Gómez y Santaúrsula Aguado. Mal. Amonestó con tarjeta amarillas a Silva, Brais, Aritz, Sola y Fernández por parte de la Real y a Emery, Lo Celso, Albiol y Pau por el Villarreal.

  • Incidencias: 32.689 espectadores se dieron cita en el Reale Arena. Gran ambiente en la grada, que celebró por todo lo alto la victoria con el pitido final.

Monopolizar el balón y fijar. Porque para el descanso se retiró con un 73% de la posesión. Es la distancia entre un equipo propositivo y otro cobarde que juega a aprovechar el fallo del rival. Como el día y la noche. La Real entró muy bien al partido porque demostró cabeza para combatir el repliegue del Villarreal montado sobre un dibujo de 1-4-4-2 bastante hundido en su campo. La receta castellonense pasaba por robar y contragolpear, y lo que hizo el cuadro txuri-urdin fue dominar el balón para someterle en una posición alta y presionarle fuerte para que no lograra enlazar dos pases que le permitiese jugar en largo con Danjuma.

Publicidad

Presión

La Real realizó un pressing muy alto al Villarreal que le metió demasiado atrás y que completó con un balón que monopolizó

Bandas

Imanol decidió atacar a Yeremy y Femenía con Aihen, Merino y Silva y por esa zona encontró el hueco para ganar el partido

Pero la Real no se lanzó a lo loco desde el inicio, sino que fue madurando su juego mientras analizaba los movimientos defensivos del contrario. Por eso, lo primero que hizo fue fijar con Sorloth y Kubo a la defensa amarilla y estirar a lo ancho con Brais y Merino al centro del campo adversario, cargándoles más a los hombres de fuera que a los mediocentros Capoue y Parejo, que no tenían un referente claro y veían cómo Silva se les iba de un lado para otro sin que lo pudieran detectar. Completaba la radiografía un Zubimendi que, sin un hombre encima, sacaba a pasear la escoba para barrer todos los segundos balones. De esta manera la Real colocaba al Villarreal demasiado cerca de Rulli y en un posicionamiento insualmente incómodo para ellos.

La brecha, por la izquierda. Después de esta labor de análisis, llegó el momento de lanzarse al ataque a partir de los veinte minutos por el hueco que se divisaba en la banda izquierda. Yeremy es un atacante que sufre en defensa y sobre su zona los blanquiazules no pararon de hacer superioridad. Con Aihen en una posición alta, tanto Merino como Kubo, en sus caídas a banda, le pillaban en situación propicia para profundizar. Kiko Femenía no podía echarle una mano.

Publicidad

El caso es que por ahí se coló la Real para llegar a las inmediaciones de un nervioso Rulli. Después de sendos remates lejanos de Sola y Brais que no cogieron portería, un error del argentino dejó el balón en los pies de Brais, que no supo superarle en el mano a mano delante de él.

A la media hora una jugada de Aihen con centro al área fue mal despejada por Albiol y Zubimendi remató de zurda alto. Después fue Silva el que se coló por el pasillo interior izquierdo, con la colaboración de Aihen, para filtrar un pase a Kubo cuyo disparo bloqueó a córner Albiol. Tanto iba el cántaro a la fuente que tenía que romperse. Y lo hizo en el minuto 32 en un saque de esquina desde la izquierda mal despejado por la defensa del Villarreal que aprovechó Merino para picar de primeras a la espalda de la zaga rival hacia Brais, que con astucia colocó el balón por debajo de las piernas de Rulli, Un golazo que hacía justicia a una primera mitad excelsa de los blanquiazules.

Publicidad

Ver fotos

Imagen. Las mejores imágenes del partido

Oportunidades para sentenciar. Tras el descanso Emery metió a Jackson y Morales por Danjuma y un Yeremy que lo había pasado fracamente mal en defensa. Pero sin tocar un ápice el dibujo y moviendo a Lo Celso a la derecha para colocar al 'Comandante' arriba. La Real cedió algunos metros por el empuje del rival pero los mínimos para seguir respaldando una presión en campo contrario que le permitiese robar y contragolpear para definir el encuentro.

Una internada de Kubo por la izquierda con centro posterior no pudo ser rematada por Silva, de plancha, ni por Sorloth en el segundo poste. El noruego, que en la primera mitad se dedicó más a fijar centrales, gozaba de más espacios y hacía daño en profundidad como principal destinatorio de las contras.

Publicidad

En el minuto 53 se zafó en un gran movimiento de Pau pero éste le sujetó hasta en tres veces para impedir que se plantase solo ante Rulli, yéndosele largo su último control. Soto Grado, un árbitro al que le viene grande la categoría, miró hacia otro lado. Poco después sí dispondría de un mano a mano con el meta argentino tras un espectacular pase al hueco de Silva, pero no acertó a elevarle suficiente el balón.

En el tramo final pesó el esfuerzo del jueves y ahí pudo colarse el Villarreal en el partido. Imanol dio entrada a todo lo que tenía mano para sujetar la victoria: Cho, Carlos Fernández, Le Normand, Turrientes, Navarro... Y logró su propósito aunque con sufrimiento, porque Remiro tuvo que emplearse a fondo con una gran intervención ante Morales en el minuto 92. La habitual flor de Emery hubiera sido un jardín, pero la regó tan poco que se marchitó. La Real fue justa ganadora por juego, ímpetu y confianza en lo que hace.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad