Mikel Oyarzabal: cinco años, cinco apuntes
Taco largo ·
Un lustro después de su debut, Oyarzabal puede igualar hoy a Illarra como jugador de la plantilla con más partidos
La primera vez que escuché hablar de él fue el 1 de junio de 2015 en una crónica en este periódico del compañero Álvaro Vicente ... titulada 'Oyarzabal pide sitio en el primer equipo'. Era la ida de los cuartos de la Copa ¡juvenil! ante el Celta. Pero lo cierto es que un mes después estaba en Austria en la concentración del primer equipo con Moyes y tres y medio más tarde, tal día como hoy, el escocés le hacía debutar en Primera ante el Levante (0-4), en lo que es ya una fecha histórica de alguien que va camino de convertirse en leyenda. Si juega esta noche ante el Huesca igualará al otro capitán, Asier Illarramendi, como el jugador de la actual plantilla con más partidos de txuri-urdin, 203 con apenas 23 años y medio, pero con cinco grandes virtudes en este quinto aniversario.
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1.- Carisma
Rara es la ikastola en la que no se ve un niño con el 10 de Oyarzabal. En un fútbol donde se idolatra a los jugadores de fuera, Oyarzabal goza de la admiración del pueblo guipuzcoano. Cuando se agarra el escudo para celebrar un gol, a los aficionados de la Real se les hincha el pecho de orgullo. Por hacer, hace hasta de necesaria bisagra entre la Real y el Eibar, por su condición de eibartarra y seguidor del club armero.
2.- Calidad
Decían de Raúl, el delantero del Real Madrid, que era un jugador que no alcanzaba el 10 en ningún aspecto del juego, pero que era un 9 en todos. Con Oyarzabal pasa lo mismo. Su regularidad en los distintos parámetros es impresionante. En ataque golea (52 tantos, uno cada cuatro partidos) y asiste. Y en defensa es una garantía. Puede jugar en los extremos, de delantero centro, como en la selección, y hasta en la vanguardia del mediocampo. Y desde los once metros se mantiene infalible.
3.- Ambición
El coronavirus frenó momentáneamente el sueño, pero Oyarzabal ha liderado una gran oportunidad de alzar un título, la Copa, 33 años después. En los momentos importantes está ahí. Metió un gol en Balaídos el día de la clasificación europea de 2017, es una pesadilla para el Athletic, marcó el penalti de la semifinal de Miranda y tiró del carro al final de la pasada Liga.
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4.- Humildad
Ni una palabra más alta que otra, siempre elegante en la victoria y en la derrota, y con inquietudes académicas y sociales. El día del Getafe dio una lección a toda la Liga de saber estar ante las provocaciones de Nyom. Es una estrella alejada de extravagancias e histrionismos, que no escatima ni una foto con niños y seguidores.
5.- Honestidad
Es un asunto que no le gusta y que cada cierto tiempo aparece en los temores de los aficionados. ¿Acabará su carrera en la Real? Si lo hace se convertirá en una de las mayores leyendas de la historia del club y podría superar los 599 partidos Gorriz. Sabe que eso es más importante que ganar una Champions de blanco o azulgrana. Pero Oyarzabal no vende falsas promesas y afronta el asunto con honestidad, sabedor de que el mundo del fútbol da muchas vueltas. Disfruta el día a día y su cabeza amueblada sabrá gestionar una situación que seguro tendrá final feliz.
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