Apisonadora blanquiazul

Se mire por donde se mire, todo fueron buenas noticias para los nuestros, exceptuando esa ausencia inicial tras el descanso. Primer partido, por ejemplo, para Guridi, otro zurdo que puede aportar mucho en el centro del campo en una temporada tan cargada como esta. Muy bien Remiro, que salvó el empate justo antes del descanso. Para Oyarzabal ya no tengo palabras. El capitán es una mina futbolística que ojalá haga su carrera entera en la Real. Porque eso querrá decir que esta Real habrá hecho algo grande. ¿Y de Silva? Oigan, ¿alguien se acuerda de Odegaard? Es una maravilla verle jugar con esa calidad tan exquisita —ayer dos pases de gol– y sobre todo la implicación que demuestra en cada balón. ¿Y Portu? Vaya máquina. Y Gorosabel... Y Le Normand... y Zubimendi... y la reaparición muy completa de Aihen. Y miren, hasta hay que hablar de Willian José. Ni marcó ni tuvo ocasiones, que suele ser lo primero que se le pide al delantero centro, pero ayer jugó un gran partido para el equipo, desatascó muy bien el ataque cuando más cerrado estaba el partido y se relacionó a la perfección con sus compañeros con el balón.

Está de dulce la Real y por eso viene de encadenar tres victorias consecutivas en la Liga, que son cuatro si tenemos en cuenta la de Croacia, con diez goles a favor en los últimos tres partidos y uno solo en contra. Ayer, la Real alcanzó un 80% de precisión en el pase, ganó 53 duelos y otros diecisiete aéreos, recuperó 56 balones, remató trece veces, seis de ellos a puerta e hizo cuatro goles. En resumen. Viento de cola para la Real, y a destacar, por encima de las muchas virtudes que demuestra este equipo cada vez que sale al campo una por encima de todas las demás, la ambición. El equipo juega siempre a ganar, nunca se conforma y esa reacción tras el empate lo deja muy claro.

Ganó la Real fácil y con mucho merecimiento, pero por ello no puedo dejar pasar una jugada que me llamó, otra vez, mucho la atención cuando el partido ya moría con el 4-1. Me refiero al escandaloso doble penalti que no se señaló en un empujón estrepitoso a Aritz y un derribo por agarrón a Merino al mismo tiempo. ¿Lo vieron? Pues parece que el del VAR estaba en otro lado...

Ah! Y un apunte de la jornada. Parece que Bordalás se enfadó por el penalti que le señalaron ayer a su equipo y no salió a rueda de prensa... Pues sí lo hizo cuando aquel pisotón de Hugo Duro a Le Normand fue castigado como penalti. «No he visto bien la jugada», dijo entonces. Ja.

Vamos a por el Nápoles.