Los discursos de investidura de esta mañana en el Parlamento Vasco reflejan el cambio de época. Imanol Pradales, el candidato del PNV que será elegido ... esta tarde lehendakari, ha hecho una apuesta detallada por una transformación y modernización de Euskadi sobre la base de lo ya construido, centrada en la mejora de Osakidetza y en la eficacia de los servicios públicos. Y se ha comprometido a tener 'sensibilidad emocional', en escuchar a la gente, en ponerse los zapatos del principio de realidad, y en tener empatía y cercanía con la ciudadanía. Bienestar social y compromiso público. Previsible pero necesario.
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La apuesta encierra su significado en unos tiempos en los que, como ha reconocido Pradales, la democracia liberal libra una batalla feroz frente a nuevos autoritarismos que acechan a la vuelta de la esquina y en los que la pugna por la hegemonía en España ofrece un espectáculo de lamentable agresividad. Estamos a años luz. Euskadi es una sociedad que vive con estándares de bienestar europeos, pero en la que hay sectores que se sienten vulnerables y necesitan mayor protección pública. Una parte de la clase media siente, o teme, empobrecerse y eso tiene efectos políticos y sociales desestabilizadores.
La intervención de Pello Otxandiano, el aspirante de EH Bildu, demuestra que, con todos los matices que se quiera, el imaginario socialdemócrata es un amplio territorio compartido en Euskadi en el que confluyen las izquierdas y un partido de tradición socialcristiana como el PNV. En ese sentido, sí nos empezamos a parecer a los países nórdicos. El consenso es casi abrumador.
La cuestión identitaria, tan presente en Euskadi en el pasado, se ha visto amortiguado por 'las cosas del comer' y por la salud pública. Eso no quiere decir que haya desaparecido. La apuesta por un nuevo pacto estatutario que hace la coalición PNV-PSE y la 'ventana de oportunidad' de la plurinacionalidad que ensalza Otxandiano auguran esta tarde un debate en el que puede haber discrepancias pero también coincidencias y aproximaciones sobre el futuro del autogobierno. Un momento para saber si en este baño de pragmatismo empieza a fraguarse un cambio de paradigma. Y si el verano que llega a las 22.51 horas de esta noche arroja luz y permite abrir de verdad una nueva época. Que Pradales sea elegido el día más largo del año, y bajo el espíritu del solslticio, puede hasta ser hasta una señal renovadora.
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