Los 120.000 zapatos donados a Zaporeak comienzan a llegar a los campos de Grecia y Siria

Más de 100.000 pares de botas, zapatillas, zapatos de invierno y deportivas llenan estos días contenedores enteros para calzar y abrigar los pies de miles de refugiados en los campos de Grecia y Siria. La campaña de recogida de calzado que lanzó la ONG Zaporeak el pasado noviembre fue «todo un éxito. Gracias a la increíble respuesta y el apoyo de la sociedad vasca se han conseguido recaudar más de 120.000 pares de calzado», que ya han comenzado a llegar a los campamentos griegos y sirios.

A través de un comunicado, el equipo de Zaporeak informó ayer de que «gracias a las donaciones que nos hacéis mensualmente tenemos la capacidad de hacer una colaboración con nuestros compañeros de la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio y enviar un contenedor lleno de calzado para invierno que recogimos en noviembre. Además, estas donaciones nos permiten hacer un esfuerzo y comprar mantas para que las personas desplazadas en estos campos, tanto en Grecia como en Siria, puedan hacer frente a esta ola de frío de una manera más equipada».

La población refugiada, en su mayoría afgana y siria, no cuenta con la ropa adecuada para sobrellevar los inviernos. Llega el frío, las lluvias y las inundaciones y los campos carecen de herramientas e infraestructuras para hacer frente a las bajas temperaturas. Según explican desde la oenegé guipuzcoana, «las ultimas semanas en Grecia están siendo muy duras, ya que un temporal de frío con temperaturas más bajas de 0 ºC está llenando de nieve los campos de refugiados que carecen de herramientas para calentarse. Por eso es tan importante la diferencia que ha marcado la recogida de calzado en el campo de Kara Tepe, porque así las personas desplazadas en este campo pueden hacer frente al frío con unas buenas botas».

Lo mismo está ocurriendo en algunos de los campos de Siria como el de Idlib, «donde la nieve cubre todas las tiendas de campaña en las que las personas más vulnerables como niños, mujeres embarazadas o personas mayores se ven obligados a vivir».

Aunque el principal cometido de la ONG es el de repartir comida entre los refugiados, vieron que había carencia de ropa y calzado y se pusieron manos a la obra para obtener la ayuda ciudadana necesaria para proteger del frío a las miles de personas que 'malviven' en estos campos.

Desde Zaporeak, «seguimos con fuerza y determinación para hacer llegar los miles de pares de calzados que nos habéis hecho llegar a todas las partes necesarias como Atenas, Lesbos, Bosnia, Siria...». Tras esta gran recogida de calzado, esta ONG agradece a la ciudadanía «a cada persona, asociación, colegio...» sus aportaciones, porque «sin vosotros nada de esto sería posible». Asimismo recuerda que continuará repartiendo también 1.200 raciones de comida «digna» en el campo de Kara Tepe de la isla de Lesbos.

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