Se triplican las víctimas de maltrato que renuncian a declarar contra su agresor

El asesinato machista ocurrido este fin de semana en Pasaia contra Leonor, de 45 años y madre de dos hijas, ha vuelto a reabrir heridas en la ciudadanía, que continúa conmocionada por lo sucedido. En 2020 esta mujer denunció a su expareja por violencia de género, según confirmó del Departamento vasco de Seguridad a este periódico; no obstante, tras ser acogida por los servicios sociales del Ayuntamiento y después de estar viviendo en un piso de acogida y ser atendida por la asociación Bekoz Beko, la mujer «retiró la denuncia un año después» y el expediente se cerró en 2022.

Al ser la violencia de género un delito que se suele cometer en la intimidad del hogar, y generalmente sin testigos, el testimonio de las víctimas resulta fundamental para evitar la absolución del agresor. Sin embargo, el temor, las amenazas o la culpa pueden ser factores que lleven a la víctima a no declarar contra él y en ocasiones, cuando llega el momento del juicio, muchas víctimas dan un paso atrás. Sin la declaración de la víctima, el caso deriva muchas veces en la absolución del maltratador. No obstante, el número de denuncias registradas en Gipuzkoa ha aumentado un 8% (1.698 en 2023 frente a las 1.566 del año anterior).

Los datos del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género correspondientes a abril-junio de 2024, reflejan también que entre las víctimas registradas en Euskadi hubo 11 menores (9 de ellas en Gipuzkoa), cuando hace un año hubo uno, en Bizkaia, lo que se traduce en un incremento del 1.000 %.

Casi todas las cifras resultan negativas. Suben los casos de violencia machista y aumenta el miedo a declarar. Pero también las decisiones judiciales contra los maltratadores. Así, los juzgados de Violencia sobre la Mujer en el País Vasco incoaron 255 órdenes de protección en el segundo trimestre de este año. Todas fueron admitidas y finalmente se adoptaron 168. Además, en los juzgados de guardia se solicitaron 134 medidas de protección, de las que 74 fueron adoptadas y 60 denegadas.

En Euskadi la tasa de víctimas de violencia de género por cada 10.000 mujeres fue de 14, por debajo de la media nacional de 18,5 y una de las más bajas de todo el Estado.

A parte de los casos de violencia machista tratados en los Juzgados de Violencia sobre la Mujer, el CGPJ informa de los procesos instruidos en los juzgados de lo Penal de Euskadi, que enjuician delitos castigados con hasta cinco años de prisión. Los hombres juzgados por violencia de género entre abril y junio fueron 281 (-25,5 %) y en las Audiencias Provinciales, cuyas secciones especializadas en violencia sobre la mujer enjuician los delitos más graves con penas de cárcel superiores a los cinco años, se juzgaron a 9 personas, un 10% menos, y el 55,6 % de ellas fueron condenadas.

La violencia de género acabó en 2023 con la vida de 58 mujeres en todo el Estado a manos de sus parejas o exparejas, una cifra «intolerable que justifica el pleno mantenimiento de las políticas públicas de protección a las víctimas de violencia de género», según expone el último 'Informe sobre víctimas mortales de la violencia de género y doméstica en el ámbito de la pareja o expareja' que cada año elabora el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Esta cifra supera la registrada un año antes (49 víctimas) y arroja la escalofriante cifra de un crimen cada 6,2 días de media. Tan solo en cuatro comunidades autónomas, «Asturias, Islas Baleares, Cantabria, Extremadura, no se produjeron feminicidios». Gipuzkoa es la provincia con menor tasa en la serie temporal 2003-2023.

El análisis de los datos extraídos de los expedientes judiciales evidencia que la violencia de género es «un fenómeno criminal caracterizado por la diversidad», ya que afecta «a todos los ámbitos y orígenes por igual».