Trasladan a 50 malienses que viven en la calle en Donostia a diversos recursos de acogida

Esto significa que, apenas dos semanas después de que la noticia saltara al foco público, una cincuentena de malienses dejará la situación de calle y pasará a tener unas condiciones de vida dignas en varios recursos de acogida habilitados por las instituciones. Aun y todo, todavía son muchos los que siguen asentados en la plaza de las Cofradías Donostiarras del barrio donostiarra de Amara Berri, y desde CEAR aseguran que «seguiremos trabajando en coordinación con otras plazas a nivel estatal para trasladar lo más rápido posible a las personas que siguen en la calle».

La Asociación de Vecinos de Amara Berri, Amara Laguntzen y Amara Ehuntzen se han volcado con los malienses que llevan alrededor de tres meses viviendo y durmiendo en las calles de su barrio. La colaboración voluntaria se ha multiplicado en los últimos días y se está viendo reflejada, por ejemplo, en el número de citas conseguidas este lunes para iniciar el trámite del asilo. «Confirmamos que se han conseguido 11 citas nuevas, se ha doblado el número de la semana pasada», informan desde CEAR.

El profundo compromiso que ha adoptado la comunidad de vecinos con los malienses se plasmará este jueves en una reunión que mantendrá la Asociación de Vecinos de Amara Berri con la Diputación de Gipuzkoa. En dicho encuentro, los vecinos del barrio exigirán respuestas al ente foral y se les notificarán las medidas que se activarán en los próximos días.