Txomin Rogel, junto a su perro en el puesto palomero donde hoy arrancará la temporada de caza. De la Hera

«Empezar a cazar cuesta 1.000 euros»

Se abre la veda. Cerca de 14.000 guipuzcoanos inician este jueves «ilusionados» la temporada de la paloma y otras especies

Jueves, 12 de octubre 2023, 07:25

Ha llegado el día. Se abre la veda. «Arrancamos con muchas ganas una nueva temporada de caza y ya van 44», cuenta ilusionado Txomin Rogel. Este elgoibartarra de 58 años es uno de los 13.864 guipuzcoanos que afrontan este jueves la apertura de la temporada de la paloma y diferentes especies cinegéticas como las malvices o anátidas, entre otras. El periodo se alargará hasta el próximo 31 de enero para estas aves y hasta mediados de febrero para las tan preciadas y cotizadas becadas. Estas últimas requieren la cumplimentación de un formulario expedido por la Federación Guipuzcoana de Caza, ya que el cupo máximo de ejemplares capturados por cazador y día es de tres. El control en este caso, es máximo. Empiezan, pues, esos meses de madrugones diarios, de nervios por los sorteos de los puestos, de los almuerzos en el monte, de las esperas pendientes del cielo deseando que pase algo y, en definitiva, de la esperanza de que las capturas vuelvan a ser generosas, un hecho que ha ido a menos en los últimos tiempos.

Publicidad

Rogel lo tiene todo preparado desde hace días y no ve la hora de coger su escopeta, montarse en su todoterreno y dirigirse a las laderas de Leintz Gatzaga, escenario en el que practica su pasión desde que con 14 años se sacara la licencia de caza. «Al margen de capturar, que al final es lo que todos buscamos, me encantan estas fechas porque a mí lo que me hace feliz es estar en el monte, acompañado de mi perro, y disfrutar de la maravillosa naturaleza de la que gozamos en nuestra tierra», reconoce Txomin. Pero, ¿cuánto cuesta ser cazador en Gipuzkoa? ¿Qué atuendo hace falta para ello y qué horquilla de precios existe? Él nos da unas pistas y asegura que cazar, al menos al principio, «nos supone un gasto mínimo de unos 1.000 euros entre licencias, seguro, arma y equipamiento». Una cantidad, eso sí, que puede variar y mucho en función de «nuestros gustos y, sobre todo, preferencias a la hora de elegir las calidades de las que queramos que sean nuestras prendas y materiales».

Este contenido no puede visualizarse correctamente en este formato. Ver experiencia completa

Además de tener los permisos en regla para poder practicar la actividad cinegética, que rondan los 80 euros para los federados, los elementos indispensables para cazar son tener una escopeta, una chaqueta, pantalón y botas adecuadas, y un chaleco o cinturón cartuchera para poder guardar los cartuchos. Después hay prendas como guantes, gorras, gorros, calcetines especiales o prismáticos que ya son optativos y que no todo el mundo utiliza.

Para que nos hagamos una idea, el precio de un arma puede oscilar entre los 400 euros si es de segunda mano, y los 3.000 si apostamos por una nueva de gama alta. No obstante, las más comunes suelen costar alrededor de 1.200 euros. En cuanto a la ropa se refiere, una chamarra viene a costar entre 150 y 350 euros, un pantalón entre los 80 y los 150 y un chaleco entre los 60 y 120 euros. Las botas, por su parte, que generalmente suelen ser impermeables, andan entre los 90 y los 350 euros en función del modelo. A este gasto habría que sumarle el valor de los complementos que cada cazador decida añadir a su equipación y, por supuesto, el del combustible del vehículo que se utilice para el desplazamiento. En este caso las cantidades varían en función de la distancia a la que se encuentre el puesto asignado. «Cabe destacar que el desembolso principal se realiza una vez; a partir de la segunda ya desciende y solo hacen falta comprar cosas sueltas», matiza Rogel. En Gipuzkoa se trata de una caza social, lo que significa que por cada puesto se pagan entre 4 y 6 euros al día.

2.982 puestos en Gipuzkoa

De los cerca de 14.000 guipuzcoanos que dan inicio este jueves a la temporada, 11.662 están federados, lo que supone un 84% del total. De ellos, 11.545 son hombres y 117 mujeres, una cifra que continúa aumentando para satisfacción de todos. «Cada vez son más y lo vemos cada año en el curso que impartimos para el examen de aptitud para la caza, necesario para obtener la licencia», detallan fuentes de la federación. Según sus datos, actualizados recientemente, Gipuzkoa cuenta con 2.982 puestos repartidos por todo el territorio y son 110 las sociedades federadas encargadas de gestionar las diferentes líneas. Son ellas las que llevan a cabo los sorteos de los puestos –algunas los hacen diarios y otras semanales– y también las que se hacen cargo de la limpieza y mantenimiento de los mismos.

Publicidad

Desde la entidad hacen un llamamiento a todos los cazadores para recordarles que mantengan la seguridad durante la práctica de la actividad y que sean respetuosos tanto con el cumplimiento de la normativa vigente como con el medio ambiente. «Debemos dejar el monte tal y como nos lo hemos encontrado: limpio», subrayan.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete los 2 primeros meses gratis

Publicidad