DV llega a los treinta mil números

El asesinato a tiros del máximo mandatario de Estados Unidos John F. Kennedy mientras circulaba en el coche presidencial junto a su esposa, Jacqueline, el viernes 22 de noviembre de 1963 en Dallas (Texas) a mediodía local constituyó todo un acontecimiento mundial. El automóvil, al descubierto, redujo la velocidad frente al edificio del Almacén de Libros Escolares, desde donde un tal Lee Harvey Oswald, empleado del local, realizó tres disparos, dos de los cuales alcanzaron a Keneddy, que falleció horas después. Mientras el atacante era custodiado por la policía, Jack Ruby, un gánster de Dallas le disparó y lo mató. Sesenta y dos años después, el magnicidio, del que DV dio una exhaustiva información al día siguiente en sus páginas, todavía está sujeto a especulaciones y ha sido origen de un gran número de teorías conspirativas.

Un por entonces poco conocido director recibía la Concha de Oro del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, que en aquellos tiempos se celebraba en junio en lugar de en septiembre. La película era ‘The Rain People’ (‘Llueve sobre mi corazón’) y el realizador, un joven Francis Ford Coppola que el tiempo demostraría que estaba llamado a hacer Historia del séptimo arte. En sus 82 años de vida el certamen ha atravesado por todo tipo de etapas y altibajos, pero llega a la 83ªedición del mes que viene convertido en la principal cita vasca del calendario cultural, consolidado como escaparate del mejor cine internacional y con unas credenciales en cuanto a galardonados a la altura de los mejores festivales europeos. Coppola, por cierto, regresó en 2002 para recoger el Premio Donostia, en el 50 aniversario del Zinemaldia.

Domingo, 21.17 (hora de Madrid): el ‘águila’ se posa sobre la superficie de la Luna. Lunes, 03.56 (hora de Madrid): Armstrong es el primer ser humano que holla la Luna. Así arrancaba el martes 22 de julio de 1969 la crónica de portada de EL DIARIO VASCO, informando del episodio más relevante de la historia espacial y punto culminante de la carrera que por la conquista del cosmos libraban en la época EE UU y la extinta Unión Soviética. El 20 de julio el Apolo 11 alunizaba en el satélite terrestre tras un viaje de cuatro días con los astronautas Neil Armstrong, Edwin Aldrin Jr y Michael Collins. El tercero no llegó a bajar a la superficie lunar. Además de en la portada, cuatro páginas interiores ofrecían los detalles del acontecimiento. Desde entonces otras cinco misiones han vuelto a la Luna, lo que sitúa en 12 los astronautas que la han pisado.

La ikurriña en el punto más alto del planeta. Martin Zabaleta, un hernaniarra, acaba de hollar la cima del Everest acompañado por el sherpa Pasang Temba. La sensación de encontrarse a 8.848 metros de altitud es incomparable. Pasan juntos alrededor de tres cuartos de hora en la cumbre. «Porque nos insistieron para que bajáramos. Lo demás, habríamos estado más tiempo», declaró Zabaleta. La aventura iniciada seis años antes, en 1974, con la expedición Tximist encuentra por fin la recompensa perseguida y merecida por el alpinismo vasco. El nombre de Martin Zabaleta forma parte de la historia de Euskadi desde el 14 de mayo de 1980, fecha grabada para siempre en los libros de este rincón del mundo. El montañismo vasco, el país, demuestra ser capaz de la mayor de las proezas y abre una vía que casi medio siglo después continúa abierta.

El 25 de octubre de 1979 Euskadi votó mayoritariamente a favor del Estatuto de Autonomía que daría forma a su autogobierno dentro del nuevo marco constitucional. Fue un momento clave en la historia política vasca. El sí en las urnas no solo supuso la aprobación de un texto legal, sino el reconocimiento de una identidad, una lengua y una forma de gobernarse propias que se venían reclamando desde hacía décadas y que conectaba con el Estatuto de 1936, aprobado en plena Guerra Civil. Conocido como el Estatuto de Gernika, en homenaje al histórico compromiso con los derechos forales, el texto sentó las bases para la creación de las instituciones vascas actuales, como el Gobierno y el Parlamento Vasco. Nuestra portada del día siguiente se dedicó de forma íntegra a este tema tan relevante con los resultados del referéndum.

Un 30 de diciembre de 1980, a última hora de la noche, Euskadi alcanzaba un acuerdo con el Gobierno central para firmar uno de los documentos fiscales más importantes del País Vasco: el Concierto Económico. Se trata de la Constitución económica que otorga a los tres territorios una autonomía fiscal mediante la cual Gipuzkoa, Bizkaia y Álava recaudan, gestionan y regulan la mayoría de los impuestos, diseñando así su propio sistema tributario. En el acuerdo participaron el entonces presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, y el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, Pedro Luis Uriarte. Ese 30 de diciembre, la noticia del Concierto Económico copó las cinco columnas de la portada, aunque tuvo que compartir actualidad con los cuatro fallecidos por un temporal en el Mediterráneo o la derrota de la Real en Atocha ante el Sporting.

El 23 de febrero de 1981 quedó grabado en la historia de España como una fecha de máxima tensión política y emocional. Ese día, un grupo de guardias civiles liderados por el teniente coronel Antonio Tejero irrumpió armado en el Congreso de los Diputados durante la votación de investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo. El Diario Vasco, como tantas otras veces, fue testigo directo del desconcierto y narró cada paso de un intento de golpe de Estado que mantuvo al país en vilo durante más de 17 horas pegado al transistor y a la televisión. Las imágenes de los diputados encañonados, el hemiciclo tomado y la incertidumbre en las calles quedaron impresas en la memoria colectiva… y también en nuestras páginas. Así lo reflejamos en el periódico del día siguiente. Todos respiramos aliviados por el fracaso del golpe militar contra la Constitución.

71 años después de su fundación, la Real conquistó su primer título oficial –la Copa de 1909 la ganó como Club Ciclista SS– al llevarse la Liga 80/81 en el último segundo. Tras la decepción del año anterior cuando el campeonato se escapó en aquella aciaga tarde de Sevilla, la historia parecía que se iba a repetir cuando al borde del tiempo reglamentario el marcador reflejaba un 2-1 en contra y el barro del Molinón frenaba el ímpetu de los txuri-urdin. Nadie creía en el milagro hasta que el gol de Zamora generó en Gipuzkoa una explosión colectiva nunca antes vista de la que DV realizó una especial cobertura en su edición del día siguiente abriendo en portada con un significativo ¡Campeones! y una fotografía en la que se veía al conjunto blanquiazul dando la vuelta triunfal al campo en medio de la euforia de los 10.000 guipuzcoanos hasta allí desplazados.

Lo que comenzó como una idílica nevada terminó convirtiéndose en un temporal que llevó al caos a todo el territorio. Entre el 7 y el 15 de enero de 1985 el temporal de nieve y frío puso en jaque a Gipuzkoa entera y hubo que lamentar dos muertes. Como se aprecia en las imágenes de portada del DV, las calles lucían completamente cubiertas de nieve. «Psicosis de falta de productos de primera necesidad», «El País Vasco, cerca del colapso», «La falta de materias primas podría afectar a la industria», «Los muertos se congelan en el depósito de Polloe», «El Ejército abasteció de butano el Alto Deba», eran algunos de los titulares que se leyeron esos días en este periódico. En concreto, en esta portada, la «psicosis de desabastecimiento de pan y leche» o los «problemas en los diversos tipos de transporte» ya anunciaban lo que estaría por venir. «Una situación sin precedentes».

La tarde del 19 de julio de 1988 quedará en la memoria de Gipuzkoa como el trágico episodio de uno de los peores diluvios de verano de la historia del territorio. Una gota fría desencadenó torrenciales precipitaciones y el balance fue dantesco. Quince personas perdieron la vida. Elgoibar fue la localidad más castigada. Nueve de los fallecidos residían en esta población o hallaron la muerte en ella. Entre las víctimas había tres miembros de una misma familia. El mismo drama se vivió en Urretxu. Los cadáveres de algunas víctimas no pudieron ser recuperados hasta transcurridos varios días. A la pérdida de vidas se sumaron los daños materiales. Empresas anegadas al igual que viviendas, comercios, bajos o locales, calles levantadas y cubiertas de lodo. En Eibar decenas de coches fueron también arrastrados como se observa en la foto de portada.

San Sebastián acogió la salida del Tour de Francia en 1992 con una contrarreloj de ocho kilómetros por las calles de la ciudad que resultó un éxito de público, con miles y miles de personas agolpadas a lo largo del recorrido para empujar a los ciclistas. Fue un día histórico para la capital guipuzcoana al que puso la guinda un Miguel Indurain que, vestido de amarillo tras haber ganado la edición del año anterior, se impuso en la crono inicial ante el delirio de los aficionados. Este periódico realizó una cobertura pormenorizada del acontecimiento, que se extendió durante dos jornadas más hasta que en la tercera etapa la carrera abandonó territorio guipuzcoano rumbo a Pau, donde venció otro vasco, el alavés Javier Murguialday. Semejante éxito organizativo fue clave para que en 1997 Donostia albergara los mundiales de ciclismo en ruta.

Corría 1994 y el Estadio de Anoeta, inaugurado un año antes, acogía por primera vez un concierto de rock de la mano de unos Pink Floyd capitaneados por David Gilmour. Entre aquella multitudinaria actuación y las dos que ofreció Bruce Springsteen los pasados 21 y 24 de junio el recinto donostiarra ha visto pasar a los Rolling Stones, U2, Bon Jovi, Depeche Mode, Rammstein, Fermin Muguruza, al propio ‘Boss’ en otras tres ocasiones y hasta al Orfedón Donostiarra con motivo de su centenario. Apuesta de alto riesgo para los promotores, Anoeta ha devuelto a Donostia al mapa de las grandes giras de estadio de forma intermitente. La infraestructura hotelera de la ciudad y su situación geográfica de la ciudad, junto a la frontera con Francia, han permitido a una ciudad relativamente pequeña acoger eventos propios de grandes capitales.

El Palacio de Congresos Kursaal se inauguró oficialmente el 24 de agosto de 1999. Fue todo un hito arquitectónico y cultural para la ciudad y el territorio y DV le dedicó la portada de ese día, en sus ejemplar número 20.602. Dos fotografías ilustraban la portada de ese día: el aurresku protagonizado por el grupo Urbeltz ante las autoridades asistentes al acto y el concierto vespertino a cargo de Ainhoa Artea, la Orquesta Sinfónica de Euskadi y el bailarín Isaías Jaúregi. La inauguración, precedida por una fuerta polémica en la ciudad sobre la conveniencia de una intervención arquitectónica de esta naturaleza en el solar del antiguo casino, dio pie a numerosas felicitaciones a Rafael Moneo, responsable del diseño. El tiempo ha demostrado que el Kursaal fue el palacio de congresos que necesitaba una ciudad en plena transformación.

El martes 11 de septiembre de 2001 pasará a la historia como uno de los días más terroríficos de lo que llevamos de tercer milenio. El mundo se estremeció tras una serie de cuatro ataques terroristas suicidas cometidos en Estados Unidos por el grupo yihadista Al Qaeda. Fueron los atentados más mortíferos de la historia, con 2.996 muertos y unos 25 000 heridos. Las imágenes de dos aviones estrellándose contra cada una de las Torres Gemelas jamás se borrarán de la memoria colectiva, así como el impactante derribo de ambos colosos tras el impacto. De todo ello dio buena cuenta este periódico, que se volcó para dar la más completa información a sus lectores. Los ataques dañaron seriamente Nueva York, la economía global cayó en recesión y todos los países reforzaron su seguridad para evitar atentados similares. El terror a Al Qaeda quedó patente.

Los cajeros guipuzcoanos echaban humo el 1 de enero de 2002. Los más de 600.000 guipuzcoanos que vivían en los diferentes municipios del territorio llenaban las sucursales bancarias para obtener los primeros billetes de euro. En los comercios, algún despistado todavía no estaba al tanto del cambio de moneda, mientras que los comerciantes y la ciudadanía resolvían multiplicaciones mentales para conocer el valor de un 10 o 20 euros. Todo el mundo se acordará también de los famosos conversores de euros a pesetas, y viceversa, un instrumento indispensable que se quedó unos cuantos meses en las casas de cada ciudadano.

El 11 de marzo de 2004 España amaneció golpeada por el terror. Una serie de explosiones coordinadas en cuatro trenes de cercanías de Madrid dejó 193 muertos y más de 1.400 heridos, en el peor atentado terrorista de la historia del país. Aquel jueves negro, El Diario Vasco volcó todos sus esfuerzos informativos para narrar, desde la conmoción y la responsabilidad, el drama humano y social que sacudía al conjunto de la ciudadanía. Las portadas de esos días informaban y acompañaban en el duelo, en la incredulidad y en la búsqueda de respuestas. El suceso trágico copó la portada del día siguiente en El Diario Vasco con un titular a cinco columnas y una fotografía que recogía el drama que sufrió Madrid en aquella mañana en la que la barbarie terrorista segó la vida de casi 200 personas y provocó más de 1.400 heridos.

El 20 de octubre de 2011 ETA anunció el cese definitivo de su actividad terrorista. Era el comunicado que generaciones enteras llevaban décadas esperando. El Diario Vasco, que durante años había narrado con rigor, coraje y responsabilidad los horrores del terrorismo, pudo por fin contar una noticia que marcaba un antes y un después en la vida pública vasca. El fin de la violencia supuso el cierre de una etapa de miedo, dolor y silencios rotos, pero también abrió la puerta a una convivencia más plena, sin amenazas ni escoltas. La portada del 21 de octubre no necesitó grandes titulares: hablaba por sí sola. El compromiso con la memoria de las víctimas y con la verdad fue la guía de nuestras páginas. El anuncio no borraba el pasado, pero sí abría un horizonte nuevo: uno donde la paz, por fin, podía escribirse sin matices.

Granada quedará para siempre en la historia de la Real Sociedad. En Los Cármenes el equipo femenino tocó el cielo por primera vez rompiendo así moldes y barreras. El plantel dirigido por Gonzalo Arconada ganó la Copa de la Reina el 11 de mayo de 2019 al Atlético de Madrid con un ajustado 2-1 gracias a los goles de Kiana Palacios y Nahikari García. El Atlético de Madrid era el claro favorito para alzarse con la Copa pero un perfecto plan de partido diseñado por el staff realista hizo que el Atlético quedara desarbolado por completo. La Real se defendió con uñas y dientes y salió al contragolpe para golpear por partida doble. Esther superó a Quiñones al cuarto de hora, pero la Real respondió rápido con un gol de Kiana desde la frontal. Nahikari, a pase de Barrios, hizo el 2-1 definitivo con una volea que quedará para siempre en la retina de los realistas.

Un reloj como símbolo inequívoco de la Nochevieja y el cambio de año. Pictogramas de coronavirus en el lugar de los números que marcan las horas como representación del acontecimiento que marcó aquel año, y un mensaje de esperanza (2021, goazen!) de cara a un nuevo año que se intuía de recuperación y vuelta a la normalidad gracias a la llegada, en los últimos días de 2020, de las primeras vacunas. Muchas podían haber sido las portadas elegidas para recordar la pandemia de Covid que cambió el mundo y ha marcado un antes y un después. Calles y carreteras vacías, ancianos y enfermos en soledad, la alegría de los reencuentros al levantarse los sucesivos confinamientos... Pero aunque la pandemia aún siguió condicionando nuestras vidas durante un tiempo, la despedida de 2020 ya suponía decir adiós a lo más duro de la crisis sanitaria.

El 3 de abril de 2021 quedará para siempre en la historia de una generación perdida de guipuzcoanos que durante tantos y tantos años soñaban con ver otra vez a la Real Sociedad siendo campeona. 34 años después de levantar al cielo de Zaragaoza el anterior título de Copa, la Real de Imanol, Remiro, Le Normand, Zubimendi, Merino, Silva, Oyarzabal y compañía volvió a ganar el título copero nada más y nada menos que ante el Athletic, su eterno rival. Un solitario gol de Oyarzabal de penalti, que engañó de maravilla a Unai Simón, fue suficiente para tocar otra vez el frío metal. Este periódico realizó una amplia cobertura con hasta 51 páginas, además de una primera página en formato de sábana con la palabra «txapeldunak!!!!!». En plena época Covid, cinco compañeros se trasladaron a Sevilla para contar la hazaña de primera mano. Inolvidable.

Los éxitos olímpicos avalan a Maialen Chourraut como la mejor deportista guipuzcoana de todos los tiempos. A los 38 años sumó en Tokio la medalla de plata a la de oro conseguida en Río de Janeiro en 2016 y a la de bronce con la que inició en Londres 2012 su idilio con los Juegos. Completa el palmarés con éxitos en campeonatos de Europa y del Mundo. Ser madre no detuvo una carrera incomparable y llena de éxitos de la piragüista lasarteoriatarra, para quien el kayak monoplaza no guarda secreto alguno cuando se trata de descender por canales de aguas bravas. Ha competido frente a rivales de distintas generaciones, las mejores del planeta. Sin bajar los brazos, apoyada en entrenamientos espartanos. Tokio, a finales de julio de 2021, supuso un hito dentro de una trayectoria poco menos que irrepetible. Chourraut forma parte de la leyenda.

La invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero de 2022, que degeneró en una guerra abierta pero desigual que para vergüenza del mundo aún no ve su final, supuso el regreso de los conflictos militares a Europa, que habían quedado atrás desde la guerra de los Balcanes. La cifra concreta de víctimas se ignora, aunque se calcula que hasta mediados de este año había causado la muerte de más de 15.000 civiles ucranianos y más de 200.000 soldados entre ambos bandos. Los combates también han generado la mayor crisis de refugiados en el continente, con más de 7,3 millones de ucranianos que han abandonado el país, y en su momento se puso en peligro la disponibilidad de alimentos a nivel mundial. EL DIARIO VASCO ha realizado un completo seguimiento de la guerra y de la llegada de numerosos refugiados, muchos de ellos niños, a Gipuzkoa.

La meta aún se divisa lejos, pero cada vez quedan menos peldaños por escalar hacia la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Ocho guipuzcoanas fueron protagonistas de la portada del 8 de marzo de 2023 en el Día Internacional de la Mujer. Puño en alto, sobre una escalera y bajo un marco morado que simboliza el impulso para no detener la marcha y la ascensión hacia una sociedad igualitaria. Unidas en lo esencial, DV reunió a estas mujeres con diferentes realidades para dar visibilidad a los problemas que aún hoy sufren en una sociedad que necesita de días como el 8-M: la violencia de género, la brecha salarial, los cuidados... Aquí, algunas frases que dejaron estas mujeres: «Hay gente a la que no le agrada que le supervise una mujer», «si las mujeres se ponen poca ropa cuando salen por la noche...», «a veces siento que me censuran las conversaciones».

El retrato que Eduardo Chillida Belzunce realizó de su padre fue portada de El Diario Vasco el 10 de enero de 2025, día exacto del centenario del gran artista donostiarra. Ese dibujo evoca el influjo en el ámbito artístico y más allá que ha ejercido el creador donostiarra. Desde esos ‘Peines del Viento’ convertidos en uno de los enclaves más emblemáticos de Donostia hasta la dimensión internacional de su obra que irradia Chillida Leku, la figura y la obra de Eduardo Chillida han llevado el nombre de Gipuzkoa al mundo desde hace más de medio siglo. Fallecido en 2002, el interés hacia sus distintas facetas creativas concita la atención artística en todo el mundo, como demuestra la abigarrada programación que ha acompañado la celebración de la efeméride. Una figura, la de Eduardo Chillida, inseparable de la de su mujer, Pilar Belzunce.