Gipuzkoa es el territorio vasco con más conductores a la fuga sin pagar en gasolineras

Son seis más que en Bizkaia y 128 más que en Álava, provincia con menor presencia de este tipo de delito. Este número supone un incremento del 4,5% respecto a 2023, cuando se detectaron 132. En ese curso Bizkaia firmó la marca más elevada con 354 y Álava volvió a ser la menos afectada con sólo 47 denuncias.

La frecuencia de estos 'simpas' parece haberse reducido en los primeros cuatro meses de este año –14 en Gipuzkoa y Bizkaia, y dos en Álava–, pero el dato sigue siendo considerable y existe un motivo que explica, en parte, el fenómeno: la AP-8 entre Irun y la frontera francesa es un tramo muy concurrido. Es la carretera que más afluencia de tráfico soporta en el territorio, y más en verano. Este año se esperan más de cuatro millones de desplazamientos sólo en la época estival. Este incremento tiene un impacto directo en todas las estadísticas, también en las delictivas. Cuanto más vehículos haya en la carretera, más escenarios problemáticos surgen.

«En verano tenemos mucho más tráfico y, si aumenta esto, sube todo. También los 'simpas' en las gasolineras», confirma el responsable de la estación de servicio de la AP-8 sentido Irun, a la altura de Oiartzun. Este tramo se presta especialmente a este tipo de trampas debido a su proximidad con la muga. «Suele ser bastante habitual. Los conductores echan gasolina y se van sin pagar. En pocos minutos ya han cruzado al otro lado y es más difícil identificarlos».

En estos casos, la gasolinera denuncia a la Ertzaintza. «Denunciamos y mandamos las imágenes a la policía para que intenten identificar al conductor del vehículo. Ahí termina nuestra labor, a partir de entonces es la Policía la que se coordina con otros cuerpos para notificar las sanciones». Desde la Ertzaintza confirman que son las «grabaciones que acompañan la denuncia, en las que se observa tanto el vehículo como la persona que no realiza el abono del combustible repostado», las que «dan pie a la investigación» que se abre a posteriori.

El trabajador de esta estación de servicio asegura que «prácticamente todos» los delitos los cometen «los coches particulares». Los camiones «apenas» incurren en este tipo de faltas. «Desde la gasolinera sólo ponemos la denuncia, no sabemos si la investigación llega a buen puerto y si finalmente se terminan pagando las cuantías». Aunque la mayoría de 'simpas' se producen sentido Francia, en la otra dirección también se observan casos. «Hacen 'simpas' indistintamente de la dirección. Camino a la frontera o al revés, cuando vienen para aquí. Casi siempre son extranjeros, y cuando lo hacen sentido Oiartzun se la juegan más porque les pueden dar el alto en cualquier peaje o control».

Sin ir más lejos, el año pasado esta gasolinera sufrió un caso llamativo. Dos hombres, de 39 y 41 años, fueron detenidos en Nanclares de la Oca (Álava) por protagonizar sendos 'simpas' en esta estación de servicio. Ambos circulaban con vehículos cuyas documentaciones habían sido falsificadas, y la cuantía sin abonar ascendía a 200 euros por tanque.

La Ertzaintza inició un dispositivo de búsqueda que culminó dando con ambos vehículos y sus conductores en la mencionada localidad alavesa. Durante la investigación se llegó a sospechar que podían acumular más de una docena de impagos en esta misma gasolinera, aunque no trascendieron detalles concluyentes del caso.

A unos quince kilómetros de esta estación de servicio se encuentra la gasolinera Bidasoil, pegada a la orilla del río Bidasoa que delimita la frontera entre el territorio español y el francés. La proximidad de este establecimiento a la muga es aún mayor que las de la AP-8, pero el flujo de tráfico que soportan es mucho menor. «No son tan habituales pero sí nos encontramos con algunos casos», admite Itsaso Lozano, responsable del surtidor ubicado en el barrio irundarra de Behobia.

«Es más común que algunos aprovechen los momentos con más tráfico para pagar 20 euros en vez de 50, porque a veces con todo el lío que tenemos nos podemos confundir». Pero a veces, el ingenio de estas personas va más allá. «También encontramos casos de gente que llena el tanque del coche y dos bidones de gasolina, y sólo paga el tanque», reconoce Lozano. Aunque en las estaciones de servicio aseguran que «no es una práctica muy extendida», Gipuzkoa es el único territorio vasco que ha sufrido un aumento –seis casos más– de este tipo de delitos entre el año 2023 y el 2024.