Gipuzkoa ha abierto el 64% de las plazas residenciales que tenía previstas poner en marcha para 2021. IÑIGO ROYO
Políticas sociales

Gipuzkoa tiene pendiente abrir casi 400 plazas en servicios sociales por el parón del covid

La Diputación asegura que las medidas de aislamiento les han obligado a aplazar cuatro de cada diez nuevas camas y que retomará los planes a partir de julio

Macarena Tejada

San Sebastián

Sábado, 11 de junio 2022, 07:11

Gipuzkoa ha aplazado la creación de casi el 40% de las plazas residenciales que tenía previstas para el año pasado. La hoja de ruta ... de los servicios sociales con la que trabaja la Diputación tenía marcado el objetivo de finalizar 2021 con un total de 869 nuevas plazas, casi la mitad, 395, en centros sociosanitarios. Pero las medidas adoptadas en estos recursos para garantizar los aislamientos durante la pandemia han retrasado la ejecución de todas las plazas y solo se han llevado a cabo el 64%, según la Diputación. Todavía quedan más de trescientas por sacar adelante. La Diputación afirma que retomará los planes a partir de julio, ahora que la pandemia ha concedido un respiro, también en los centros de servicios sociales.

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El coronavirus ha puesto «patas arriba» el plan inicial, aseguran fuentes del departamento de Políticas Sociales. Hasta 2020 no hubo ningún inconveniente para seguir el mapa de servicios sociales 2018-2021, que entre sus objetivos incluía el incremento de plazas y servicios para reducir las listas de espera en una sociedad cada vez más envejecida. A partir de entonces, «con los graves problemas que han sufrido los servicios de atención no tenía sentido abordar el aumento de plazas», se lee en la memoria de 2021 del departamento de Políticas Sociales, que habla de 5.319 plazas disponibles en estos momentos en las 65 residencias de mayores que hay en Gipuzkoa. De ahí que, de forma «excepcional», se haya decidido prorrogar la vigencia del mapa 2018-2021 hasta este año y desarrollar el siguiente a partir de 2023, con la «esperanza» de que desde el Gobierno Vasco aprueben el nuevo mapa vasco.

Las cifras

  • 478 personas estaban en diciembre en lista de espera para entrar en una residencia de mayores.

  • 869 plazas tenía previsto crear la Diputación en los centro sociales para el año pasado, 395 en centros sociosanitarios.

  • 85,15 años de media tienen las personas que ingresan en una residencia y 87,9 las que causan baja (suele ser por defunción).

La capacidad de las residencias de mayores se ha visto mermada por la crisis sanitaria. El área que dirige Maite Peña ha dejado 400 plazas libres «para garantizar los aislamientos en caso de un positivo» y evitar que el virus se expanda por la residencia, uno de los retos más complicados cuando el bicho entra a un recurso de este estilo. Precisamente por eso, y a pesar de las 150 nuevas plazas que se concertaron a lo largo del año pasado –18 en centros de mayores–, «la pandemia ha incidido en la disminución de la lista de espera», según recoge el documento. No obstante, «se mantiene la necesidad» de ampliar plazas.

A pesar de que el número de mayores que aguardan su turno para entrar a una residencia se ha reducido en un 40% por la crisis sanitaria, los últimos datos, de diciembre de 2021, hablan de 478 personas a la espera de una plaza residencial en Gipuzkoa. Una caída que «no va ligada con la falta de necesidad sino con la pandemia». El temor a los contagios, la obligatoriedad de pasar cuarentenas en ocasiones más estrictas que las del resto de la sociedad y las restricciones de salidas y paseos explican este descenso.

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Desafíos

Aunque la demanda se haya reducido, la realidad es que Gipuzkoa tiene una población cada vez más envejecida. Solo en la última década, las personas mayores de 85 años se han disparado en un 136%. Esto es, si en el año 2000 había un total de 12.058 octogenarios, nonagenarios o incluso centenarios en el territorio, en la actualidad hay 28.477. Más del doble. Así, la Diputación se afronta a uno de los mayores retos de este momento: cómo atender a este colectivo, que en su mayoría prefiere alargar la estancia en su domicilio antes de ingresar en una residencia, donde la edad media de quienes causan alta es de 85,15 años –y de 87,9 de quienes causan baja, normalmente por fallecimiento–.

Las claves

  • Lista de espera El número de mayores que aguardan su turno para entrar en una residencia se ha reducido un 40%

  • Población envejecida Gipuzkoa afronta el reto del envejecimiento con un 136% más de mayores de 85 años en una década

La pandemia no solo ha afectado a las residencias, también a los centros de día, que estuvieron cerrados durante meses por el riesgo de contagio entre los mayores, el colectivo más vulnerable ante el virus. 2021 fue el año de transición, en el que los recursos comenzaron a reabrirse gracias a la vacunación. Sin embargo, el miedo todavía acechaba a las cerca de 2.000 personas que llevan a sus familiares a los centros de día. En diciembre había 120 mayores en lista de espera, todavía un 35% menos que en 2020.

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La crisis sanitaria ha puesto sobre la mesa la importancia de reforzar la atención a los mayores. Reforzar la atención domiciliaria es uno de los retos, pero también cambiar de modelo de atención en las residencias, que ya transitan hacia la Atención Centrada en la Persona (ACP), con la residencia de Usurbil como primer recurso creado desde cero bajo esta premisa. El centro, que espera estar en funcionamiento a finales de año, estará dividido en pequeñas casitas individuales, al igual que Adinberri, otro de los grandes proyectos del departamento de Políticas Sociales. El centro de envejecimiento de referencia del territorio, situado en Pasaia, comenzará a finales de año y se prevé que esté listo para 2026.

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