Euskadi da dos años para que tarjetas como la Mugi sirvan en todo el transporte público vasco

La normativa tiene como objetivo básico reducir las emisiones contaminantes del transporte, principal agente contaminador en Euskadi al ser el causante del 34% de los gases de efecto invernadero. Para ello busca potenciar el uso del transporte público y la movilidad activa, como la bicicleta, en detrimento del vehículo particular. Para lograrlo avala medidas coercitivas, como la imposición de costes directos a los conductores, o las limitaciones de acceso a los núcleos urbanos con mayor impacto ambiental.

En esa línea, faculta a las administraciones vascas (Gobierno Vasco, diputaciones y ayuntamientos) a servirse de la fiscalidad para lograr los objetivos recogidos en la ley. Así, las instituciones podrán establecer, cada una dentro de sus competencias, nuevas tasas o cánones medioambientales, así como gravámenes sobre los ya existentes. También se podrán aprobar nuevos impuestos u otros instrumentos tributarios «que desincentiven determinadas actividades que vayan en contra de los objetivos de esta ley». En sentido inverso, podrán aprobarse bonificaciones, reducciones o exenciones de tipo impositivo «para las actividades que fomenten actuaciones que tengan por finalidad cumplir con los objetivos de la ley».

Respecto a la interoperabilidad de las tarjetas, para los titulares de la Mugi de Gipuzkoa supondrá poder cerrar el círculo y poder utilizar esta txartela en los buses de Bizkaibus y Bilbobus, los únicos que faltan. Y es que además de en el transporte de Gipuzkoa, la Mugi se puede utilizar como medio de pago (en estos casos sin descuentos), en el Metro de Bilbao, los buses urbanos de Vitoria y los interurbanos de Álava, y en los tranvías y funiculares de Euskotren (Bilbao, Vitoria y Larreineta).

En sentido inverso, obligará a los operadores guipuzcoanos a aceptar la Barik y la BAT, algo que ahora solo hacen Dbus, la compañía de buses urbanos de San Sebastián, y Euskotren con la Barik. Algunos operadores, como Lurraldebus, llevan tiempo trabajando en esa línea y está previsto que vizcaínos y alaveses puedan abonar sus viajes en los buses de Lurraldebus en breve.

La ley establece que, dentro del impulso global al transporte público, la red ferroviaria será el «eje estructurante de la oferta», siendo los autobuses por carretera servicios «complementarios». En esta línea se explica el gran esfuerzo inversor que el Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno Vasco que dirige Iñaki Arriola (PSE) está haciendo en la línea de Euskotren, que el año próximo recibirá en Gipuzkoa 117 millones de euros, el doble que los 57 para el TAV. Las principales inversiones son la pasante subterránea de Donostia, el tramo Altza-Galtzaraborda y la reforma de estaciones.