Dos condenados por apalear y herir de un botellazo a un joven en Errenteria
Se impone a uno de ellos siete años de prisiónpor robo con violenciay lesiones con objeto peligroso, y al otro dos años y medio de cárcel por el robo
Dos varones han sido condenados a penas de prisión por haber propinado una paliza a un joven en Errenteria tras haberle sustraído su teléfono móvil. Los hechos ocurrieron la madrugada del 6 de enero de 2019, cuando el joven fue asaltado por un grupo numeroso de personas, que le apalearon y después le dieron un botellazo en la cabeza. Tres fueron detenidas, una de ellas un menor de edad que ya fue juzgado. Ahora los otros dos agresores han sido condenados, uno de ellos a siete años de cárcel por un delito de robo con violencia y un delito de lesiones con instrumento peligroso, ambos con agravante de superioridad, y el otro a dos años y medio de cárcel por robo con violencia. Además, el fallo les obliga a indemnizar al perjudicado en 65 euros por la cartera que le sustrajeron y con 7.290 euros por las lesiones y el perjuicio estético sufrido, ya que el botellazo le dejó cicatriz. En el juicio los dos acusados negaron su implicación en los hechos.
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El tribunal considera probado que la madrugada del 6 de enero de 2019, en las inmediaciones de la calle Juan de Olazabal de Errenteria, los dos acusados, ambos naturales de Marruecos, junto con otra persona menor de edad que ya fue condenada y un cuarto varón que no se ha logrado identificar, se acercaron al denunciante y el menor le sustrajo la cartera del bolsillo trasero del pantalón, pidiéndole este que se la devolviera. En ese momento se «abalanzaron» sobre él «un número indeterminado de personas» que iniciaron una pelea, entre las que estaban los acusados, hasta que uno de ellos emprendió la huida. El denunciante le siguió hasta la plaza de la Diputación, en la zona de Iztieta, y otros varones implicados en la pelea también le siguieron hasta allí (se habla de que podían ser más de diez).
Una vez en la plaza, el perjudicado logró alcanzar al hombre que había huido, que estaba en el suelo, aunque en ese momento llegaron al lugar el resto de hombres, entre ellos el otro acusado quien, «aprovechando la superioridad numérica», cogió una botella de cristal que había en el lugar y le golpeó con la misma en la cabeza. El impacto rompió la botella y provocó al denunciante un corte de 10 centímetros en la cabeza y que cayera desplomado e «inconsciente» al suelo, momento en el que los agresores abandonaron el lugar.
Por otra parte, el tribunal considera que no se ha probado que los dos hombres ya condenados le robasen el móvil o que tras la agresión con la botella, estando en el suelo, le patearan.
Modus operandi conocido
En el juicio, celebrado el mes pasado en el Juzgado de lo Penal número 2 de Donostia, compareció un agente de la Ertzaintza que participó en la investigación y que aseguró que los agresores «tenían un modus operandi», por el cual esperaban a la gente que salía de madrugada de un bar de copas, «uno robaba la cartera, se la pasaban unos a otros, y la cartera siempre acababa en el bolso» de la novia del hombre que ha sido condenado a siete años de prisión.
El otro implicado era un menor tutelado por la Diputación
Aunque fue un asalto multitudinario en el que se cree que participó una decena de personas, la Ertzaintza logró identificar a tres varones como autores del hurto y las lesiones graves. Uno de ellos era un menor de 17 años de origen magrebí, tutelado por la Diputación de Gipuzkoa y que residía en un centro de menores de Oarsoaldea. Este fue condenado por el Juzgado de Menores de Donostia a un año de internamiento terapéutico en régimen semiabierto por un delito de hurto con lesiones, si bien la sentencia fue recurrida y finalmente la Audiencia de Gipuzkoa redujo la pena a seis meses. El joven, que ahora tiene 20 años, compareció como testigo en el juicio contra los otros dos imputados por estos hechos.
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