Comienza la primera edición virtual de la Euskal Encounter con un guiño a Urretxu

La imagen, siempre impresionante, ya se había convertido en una de las clásicas del verano y era una cita obligada para los fotógrafos. Era el paisaje nocturno del Euskal Encounter en los cavernosos pabellones del BEC, dominados por una oscuridad rota por miles de motas de luz, los ordenadores de los más de 5.000 participantes de la fiesta vasca de los aficionados y profesionales de la informática y las nuevas tecnologías. Esta panorámica no se producirá este año por culpa de la Covid-19.

La gran 'party' comienza hoy y se desarrollará hasta el domingo, pero lo hará en su versión más telemática. Por seguridad sanitaria, sus 5.088 participantes no ocuparán 50.000 metros cuadrados de pabellones. Se 'reunirán' virtualmente, conectados desde sus casas para trabajar, jugar, crear y aprender.

Esta primera edición totalmente virtual de Euskal Encounter ha lanzado un guiño a sus orígenes. Sus organizadores trabajarán desde el frontón Ederrena de Urretxu. Se trata del «mismo emplazamiento en el que se celebró la primera Euskal Encounter en 1994».