Buscan dónde instalar un sistema terrestre de sellado con espuma del vertedero de Zaldibar

Las labores para sellar con espuma las zonas del vertedero de Zaldibar que pueden incendiarse sigue a buen ritmo. De momento, solo por aire, aunque ya se están buscando ubicaciones para que estas labores se hagan también por vía terrestre. La idea de los responsables es que «en los próximos días», se pueda instalar «un sistema sellante con espuma impermeabilizante» desde tierra.

Así se ha comunicado este lunes en la reunión de la mesa técnica de coordinación y seguimiento sobre la crisis ocasionada al venirse abajo las instalaciones de Verter Recycling 2000. En dicha cita, que arrancó a las 9.30 horas, han estado representados los departamentos de Medio Ambiente, Salud, Seguridad, Trabajo y Justicia, además de la Diputación Foral de Bizkaia.

El sellado con espuma se inició este domingo de la mano de la empresa Helitrans Pyrineés de Andorra, especializada en el transporte de material, el montaje de ancorajes para aludes y protección antidesprendimientos vía aérea.

El helicóptero cubrió ayer una buena parte de la zona en la que se han producido los fuegos durante seis horas de trabajo, hasta que hubo luz suficiente. Realizó 60 descargas. Hoy por la mañana está previsto que lo haga durante tres.

En total, vertió unos 46.800 litros de producto en el corte del desprendimiento, entre el talud original de la escombrera y la cota más alta de la montaña de basura y tierra que se vino abajo. Allí, el metano que genera el desperdicio de materia orgánica en fermentación llegó a activar cuatro focos. Y sigue habiendo peligro porque las llamas se alimentan de la basura depositada y hay riesgo de derrumbe, lo favorecen la reignición al remover materiales y gases. De momento, la aeronave ha fijado su base en el parque de bomberos de Iurreta.

Además de esto, también se ha informado sobre el estado de las labores de búsqueda de los dos operarios desaparecidos, Joaquín y Alberto, que continúan «con normalidad». Es más, se espera que se puedan «intensificar y concentrar» todos los esfuerzos para encontrar los cuerpos cuanto antes. Algo que se ve favorecido por el avance «positivo» de los trabajos de estabilización del terreno y de control de los fuegos.

A los operarios se les busca, fundamentalmente, en cuatro zonas. De momento, se ha construido una vía empedrada para «vaciar», desde una cota más alta, el material que puede desprenderse sobre ellas. La primera, (B1) donde estaba la báscula y se cree que está al menos uno de los trabajadores, es donde se actuó tras las primeras horas del derrumbe. Aquí se empezó a desescombrar con máquina el día 9. Se extrajeron 500 toneladas pero la extracción se paralizó el lunes 10, por riesgo extremo de desprendimientos.

Por debajo de este lugar, (zona B2) se estuvo desescombrando hasta el sábado 21. En solo un día, se retiraron 2.000 toneladas, aunque de momento, los especialistas han recomendado parar la labor por peligro. Mientras, en la lengua de material que desciende desde este punto hasta la autopista (B3) se retiran escombros desde el principio. Las máquinas se desplazaron el sábado a la zona B4, la más cercana al caserío, pero que es también muy inestable. Todo el material que se extrae es cribado por perros entrenados.