El Aita Mari pone rumbo a su novena misión de rescate
El barco de salvamento ha zarpado esta mañana desde el puerto de Castellón con destino al Mediterráneo Central tras recibir el último permiso del Gobierno
El buque de rescate Aita Mari, de la ONG Salvamento Marítimo Humanitario, ha puesto rumbo este viernes por la mañana desde el puerto base de Vinaròs (Castellón) al Mediterráneo Central en su novena misión para salvar vidas. Después de haber pasado algunos meses en puerto, el Aita Mari vuelve a iniciar una misión de rescate a migrantes que intentan llegar a Europa a través del mar Mediterráneo.
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Según ha informado la ONG, este viernes iniciarán la ruta tras superar la inspección de bandera y recibir la última notificación del Gobierno de España. Con esta singladura da comienzo la novena misión del barco de rescate, la primera del año 2023. En la anterior, en junio del año pasado, el Aita Mari consiguió rescatar a 113 personas.
Según denuncia SMH, en los últimos meses «las trabas políticas que tratan de impedir esta actividad humanitaria son cada vez más fuertes». En este sentido recuerda que «dentro la campaña política del Gobierno italiano para detener a los barcos de rescate, la ONG se enfrenta ahora a una posible sanción económica por una causa derivada de una inspección en Palermo el 2020». Indican, no obstante, que mientras el caso se encuentra en periodo de alegaciones, el buque no detiene su labor y va a continuar intentando evitar más muertes en el Mediterráneo. En lo que va de año, 104 personas han perdido la vida en esa ruta migratoria.
La primera misión del Aita Mari se remonta a 2019 y desde entonces, ha realizado ocho misiones con más de 1.000 vidas salvadas. Según recuerdan, atentiendo a datos de ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, aunque el número de personas que cruzan desde las costas de Libia hasta Italia o Malta ha disminuido en comparación con el año 2015, pero son cada vez más frecuentes las travesías con desenlaces fatales. En el año 2021 se registraron alrededor de 3.231 muertes y desapariciones en el mar Mediterráneo y 2.365 en 2022.
SMH indica que la mayoría de estas personas huyen de conflictos, escapan de persecuciones y violencia y son víctimas de violaciones de sus derechos humanos y necesitan, por lo tanto, de protección internacional.
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