La movilización electoral puede dar la sorpresa en Euskadi
Comicios reñidos. Las autonómicas vascas estarán muy reñidas, bajo una pinza entre la polarización nacionalista y la tensión política española. La campaña será decisiva.
Las elecciones autonómicas vascas se asoman en el horizonte a falta de que el lehendakari Iñigo Urkullu despeje de una vez la incógnita y concrete ... la fecha de los comicios, un calendario que podría anunciarse ya la próxima semana que, en todo caso, contemplaría la cita con las urnas para después de las vacaciones de la Semana Santa, con anterioridad a las europeas. La reñida polarización entre el PNV y EH Bildu es una de las variables claves de la cita, pero tampoco puede soslayarse el convulso contexto político español y el ruido que proyecta la legislatura de la amnistía. Además, entrará en escena el papel decisivo que puede tener el PSE, la implicación de los jóvenes y la incidencia que puede provocar el tono de la precampaña en los sectores más abstencionistas e indecisos, que, inquietan sobre todo a los jeltzales. La movilización electoral podría provocar una sorpresa en Euskadi. Cuatro politólogos analizan en DV este cuadro de situación en medio de una precampaña marcada en gran parte por el debate de la gestión. ¿Hay pulsión de cambio? La sorpresa puede colarse por la ventana en función de la movilización y, de antemano, no hay nada escrito. Las formaciones vascas creen que en las próximas semanas se irán despejando los movimientos. Las cartas están sobre la mesa.
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María Silvestre Directora del Deustobarómetro
«PNV y PSE repetirán la alianza de gobierno»
PNV y EH Bildu están empatados en intención de voto, según los últimos sondeos y la fuerza soberanista podría convertirse en la opción más votada, puesto que no se prevé la mayoría absoluta. La clave en estas elecciones es el pacto para formar gobierno. La arimtética forzará la política. El pacto más factible es el de PNV-PSE, no creo que las dos fuerzas soberanistas, PNV y EH Bildu, formen un gobierno de coalición, a pesar de las declaraciones de los candidatos Eneko Andueza e Imanol Pradales. Los escaños del PSE serán importantes y tanto PNV como PSE son las fuerzas que vienen definiendo la gobernabilidad vasca en los últimos años. Es cierto que se presentan como unas elecciones binarias entre el PNV y EH Bildu, y eso va a marcar los tonos, los mensajes y las posturas de las fuerzas políticas en la campaña y en la precampaña. Sin embargo, si la suma PNV-PSE alcanza la mayoría absoluta, esta será la primera opción. Pero si esto no es así y otros sumatorios también posibilitan la gobernabilidad, otras opciones también son posibles, ya sea el bloque nacionalista o el bloque de izquierdas. No creo que la polarización española influya en los próximos comicios vascos. Si en España la polarización la protagonizan PSOE y PP, en Euskadi la van a protagonizar las dos formaciones soberanistas. El sistema político vasco es muy diferente al español. La disputa será sobre quién mejor de los dos, PNV y EH Bildu –que han asumido su rol en el Congreso– representan los intereses de la sociedad vasca en la política española.
Jonathan Martínez Polítólogo
«El choque con Bildu no está arrojando frutos al PNV»
Los sondeos de 2023 no vieron el alcance de la derrota del PNV y el impulso ascendente de EH Bildu. De cara a las próximas elecciones no cabe demasiado margen para la sorpresa. De cara a las próximas elecciones autonómicas no queda demasiado margen para la sorpresa: todos los sondeos pronostican que Imanol Pradales y Pello Otxandiano podrían disputarse la primera plaza. Si el sorpasso finalmente se confirma, será un suceso novedoso pero no sorprendente. En todo caso, sería la culminación de una tendencia sostenida desde 2012: la trayectoria descendente del PNV y el crecimiento sostenido de EH Bildu. El mito de la hegemonía eterna jeltzale se ha resquebrajado hace ya tiempo. Ya no existen confluencias soberanistas que confronten con el Estado, como ocurrió en la era Ibarretxe. El PNV ha trasladado la línea de confrontación contra EH Bildu. En buena medida, esa estrategia le permitía retener al electorado autonomista y conservador que en pasadas citas electorales se identificaba con el PP (Mayor Oreja llegó a tener 19 escaños en los tiempos de tensión soberanista mientras que el PP ahora solo tiene seis). Sin embargo, el choque dialéctico con EH Bildu ya no está arrojando frutos en Sabin Etxea. La política de bloques que opera en el Congreso va a tener su reflejo en las próximas elecciones gallegas, donde se dirime la continuidad del PP o la alternativa de una entente entre BNG, PSdG y Sumar. Esta dinámica no funciona en las elecciones autonómicas vascas.
Braulio Gómez Doctor en Sociología y Ciencias Políticas
«Sería una sorpresa que el PNV recuperase su voto»
¿Cuál es la sorpresa que aguardan las próximas elecciones autonómicas vascas? Ya no sería una sorpresa que Euskal Herria Bildu ganara las próximas elecciones en votos y en escaños. Tampoco sería una sorpresa que el PNV y el PSE no alcanzaran la mayoría absoluta en el nuevo Parlamento Vasco. Este escenario es posible y entra dentro de las señales que transmiten los resultados electorales de 2023 y las encuestas que se están publicando centradas en las elecciones vascas en los últimos días. Sería una sorpresa que el PNV lograra movilizar a su electorado perdido y mantuviera su fuerza parlamentaria.
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Estas elecciones se desarrollarán en una escenografía política de apelotonamiento en la centralidad y en la socialdemocracia de todas las fuerzas políticas menos el Partido Popular. Euskal Herria Bildu ha elegido competir por la moderación para presentarse como el heredero natural y agradecido del Partido Nacionalista Vasco. El PNV, si no cambia de estrategia EH Bildu, lo tendrá difícil para activar el miedo como emoción electoral.
¿Puede incentivar la participación electoral en Euskadi el ruido de la política española? La polarización española puede hacer aumentar la participación electoral en el espacio no nacionalista que tiene más tendencia a abstenerse en las elecciones autonómicas vascas. Puede beneficiar la activación del voto hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, vía PSE o hacía Alberto Núñez Feijóo vía PP vasco.
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Juan José Álvarez
«La campaña electoral será determinante»
El escenario electoral emerge más abierto que nunca y y la prospección resulta más compleja, sin duda. Si por sorpresa entendemos el sorpasso de EH Bildu frente al PNV, es decir que obtenga más parlamentarios la izquierda abertzale que el partido exponente del nacionalismo institucional, creo que es un resultado no descartable, pero la campaña electoral va a ser más determinante que nunca y hay factores todavía que no han entrado en juego. Estamos en una fase en la que el potencial votante responde en clave más emocional que racional y el momento decisivo será el momento en el que se emita el voto. Y ahí no veo tan clara esa sorpresa, aunque la fortaleza y la tendencia al alza de EH Bildu frente a los resultados a la baja de las dos últimas elecciones por parte del PNV probablemente se reflejarán en el resultado de las autonómicas, pero probablemente no impidan la continuidad en un gobierno de coalición del PNV.
La auténtica sorpresa, y en principio no la veo factible, sería que la política de alianzas postelectorales girase en torno a otro eje que al integrado por PNV y PSE y se orientase en clave de 'izquierdas' o en clave soberanista. No veo claro ni una ni otra alternativa. La polarización PNV-EH Bildu es, sin duda, un factor movilizador del voto, de contraste de modelos y de propuestas de liderazgo muy atractivo. Las otras formaciones tratan de recuperar espacios políticos alejadas de ambas, y hay que tener en cuenta que el votante analiza con perspectiva cada cita y no creo extrapolables de formas mimética ni los resultados de las generales ni de los de las municipales-forales. La novedad de los candidatos, la pretensión compartida de liderar y vertebrar el país, el momento político que contextualiza estas elecciones vascas, todo esto hace que esta polarización aporte un protagonismo adicional a la precampaña y a la posterior campaña. Hay un concepto que hace furor: la renovación. No creo que la polarización española influya en las elecciones vascas. La agenda vasca centrará el debate y la reflexión del votante.
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No creo que el clima político español contamine hasta el punto de ejercer influencia en las opciones políticas del electorado vasco. Solo concentrando las elecciones vascas y las europeas hubiera podido existir esa influencia.
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