El lehendakari Iñigo Urkullu confirma la fecha a las elecciones vascas: serán el 21 de abril

Estaba previsto que esta tarde se convocara el Consejo de Gobierno que se pospuso el martes debido al fallecimiento de la madre del lehendakari, con el fin último de dar luz verde al decreto para la normalización del uso del euskera en el Sector Público Vasco. Pero el encuentro extraordinario de Urkullu con su gabinete ha tenido un motivo más detrás: trasladar directamente a los consejeros la fecha exacta de las elecciones antes de hacerla pública a los medios de comunicación. El 21 de abril es la fecha elegida, por lo que la campaña electoral arrancará en la madrugada del 4 al 5 de abril. Una fecha que podría coincidir con la previa de una hipotética final vasca de la Copa del Rey entre Real Sociedad y Athletic de Bilbao, un encuentro que se disputará en el estadio de La Cartuja de Sevilla el 6 de abril.

Todos los grupos parlamentarios llevaban ya semanas trabajando en la hipótesis de unas elecciones el 21 de abril, desligadas de los comicios europeos de junio. De ahí que los diferentes departamentos hayan estado trabajando a contrarreloj para ir cerrando carpetas antes de que Urkullu decidiera disolver el Parlamento Vasco. Una Cámara que, por cierto, ha vivido este jueves su último pleno ordinario de la legislatura. El Parlamento será disuelto la próxima semana debido a que la normativa establece que debe quedar un margen de 54 días hasta la fecha de los comicios. El próximo día 27 se publicará el decreto en el BOPV de convocatoria electoral.

Urkullu da así por finalizada su última etapa como lehendakari -ya que el PNV ha optado por un relevo en su cartel electoral, con Imanol Pradales como cabeza de lista- después de tres legislaturas al frente del Gobierno Vasco. Un ciclo político que cerrará, además, con los deberes hechos y tras dar por «cumplido» el programa de Gobierno suscrito por PNV y PSE.

El lehendakari ha invertido gran parte de su discurso a hacer un repaso de esas tres legislaturas al frente el Gobierno Vasco. «Lo digo con sinceridad: jamás habría imaginado mayor honor», ha comenzado apuntando. Urkullu ha agradecido a la sociedad su confianza y respaldo, ha pedido «perdón» por los errores cometidos. «No hemos vivido años sencillo», ha apuntado, recordando la crisis económica primero y la pandemia después, pero «he tratado siempre de dar lo mejor de mí».

Ha lanzado un primer recuerdo «muy especial con Joaquín y Alberto», los trabajadores fallecidos en el derrumbe del vertedero de Zaldibar, uno de los momentos más complicados de su etapa como lehendakari. También a las víctimas de la pandemia y las mujeres «asesinadas y maltratadas». Ha mencionado y agradecido la labor de sus consejeros, recordando uno a uno sus nombres. Desde Erkoreka a Darpón, pasando por Aburto, Murga, Hurtado o Melgosa. Y ha puesto en valor el trabajo realizado conjuntamente con el PSE-EE en la coalición de gobierno al frente del Ejecutivo vasco. También ha hecho referencia a los pasos dados en el autogobierno.

El lehendakari ha resumido en tres ideas los principales hitos de estos 12 años al frente del Ejecutivo vasco. En primer lugar el empleo, con la reducción de la tasa de paro tras enfrentar la crisis económica. En segundo lugar la superación, tras «salir fuertes de una concatenación de crisis y guerras gravísimas y globales». Y en tercer lugar, el respeto, la cohesión y la convivencia. «En Euskadi vivimos en paz. Hemos dejado atrás la pesadilla del terrorismo. ETA ha desaparecido de nuestras vidas para siempre», ha expresado, lanzando también un recuerdo a las víctimas del terrorismo y la violencia: «Nuestra solidaridad permanece como recuerdo y denuncia de una injusticia que jamás se debió producir y que nunca más se debería repetir».

«He trabajado lo mejor que he sabido, buscando en cada decisión, en cada momento, lo que sinceramente creía mejor para nuestra sociedad», ha reconocido al finalizar el discurso. «Pido perdón por mis errores y doy las gracias a Euskadi por todo lo que me ha dado», ha confesado. «Ha sido un honor», ha rematado sus palabras antes de las preguntas de los periodistas.