«Si no se le pone coto, la inflación va a acabar con todo. El otoño será clave»

– ¿Se puede decir que de momento aguantamos el tirón?

– El dato de creación de empleo es bueno en comparación con otros junios. El dato de junio de 2021 es mejor que el de ahora pero estaba dopado ya que veníamos de la desescalada en la que resurge la economía. Por lo tanto, quitando el año pasado, este junio está por encima de la media de todos los años desde 2014. Pero en otoño podría haber datos posiblemente malos, ya que ahora se aprecia una deceleración en el descenso de parados, es decir el desempleo se ha reducido a menor velocidad que otros meses, lo que demostraría que no estaríamos ante un descenso consolidado y quizás la recuperación no es tan importante. En otoño se va a ver si el descenso del paro está consolidado.

– ¿Para ello es clave que baje de una vez la inflación?

– Sí, porque si no se pone coto a la inflación, va a acabar con todo. Las medidas laborales por sí mismas no van a modificar el mercado. La inflación es también el mayor problema para la recuperación del mercado laboral. Amenaza con comerse el impulso que dieron la reforma laboral y la existencia de ayudas a empleo y los fondos europeos.

– ¿Se aprecia tras la reforma laboral un empleo de más calidad?

– El mercado está haciendo caso al legislador al hacer más contrataciones indefinidas y es un paso importante de legalidad. Pero en realidad se están haciendo muchos contratos indefinidos parciales, no a tiempo completo, y lo determinante es ver cómo se comporta la realidad de ese contrato. Si la cultura de contratación asume que esos contratos son fijos y actúa como tal, o si va a actuar como si fueran temporales, destruyendo empleo cuando acaben las temporadas.