La fortaleza de la economía de Gipuzkoa dispara la recaudación del IRPF a un récord histórico

La fortaleza del territorio se hace más evidente si se tiene cuenta que las distintas medidas fiscales dispuestas para ayudar a los más débiles (con una deflactación del 5,5% de las tablas incluida) o a los colectivos más impactados por el alza de la energía, como los transportistas o los autónomos, supusieron un esfuerzo al Gobierno foral de casi 137 millones.

Los datos corresponden al balance de la campaña del IRPF presentado este jueves por los responsables de la Hacienda guipuzcoana, con el diputado, Jokin Perona, a la cabeza. El responsable del fisco guipuzcoano, que no sacó a colación ese récord pero sí recordó los buenos datos del mercado laboral, de las ventas de empresas y de las subidas salariales, calificó los datos de «muy buenos», toda vez que el ejercicio estuvo repleto de incertidumbres y severos condicionantes, incluida la guerra de Ucrania. Y sobre el futuro inmediato se mostró «optimista» pero también prudente, pues la incertidumbre, dijo, continúa. De hecho explicó que habrá que ver qué efecto en los márgenes empresariales pueden tener sueldos y tipos de interés al alza en la campaña de Sociedades, que se cierra este mes.

Perona exlicó que el saldo neto de la campaña de la Renta deviene de 334,29 millones pagados por Hacienda a los 285.853 contribuyentes a los que la declaración les salió a devolver, frente a los 373,95 millones ingresados de los 115.896 guipuzcoanos a los que la Renta les salió a pagar. Al 71,2% de los declarantes la declaración de la Renta les salió a devolver y al restante 28,8%, a pagar. En total se presentaron 401.749 declaraciones, la cifra más alta en diez años.

De entre todos los números y curiosidades que esconde el balance de la Renta 2022, uno llama la atención sobremanera. Y es el importe medio abonado por aquellos a los que les salió a pagar, y que ascendió a 3.227 euros, es casi un 50% o 1.000 euros más que un año antes, cuando el promedio fue de 2.179 euros. Además, esta vez han sido menos los pagadores que entonces. Consultado Hacienda por las razones de ese salto, el equipo de Perona explicó que «hay varios elementos» y que «el incremento de la base imponiblee se debe en mayor medida a los rendimientos de trabajo y actividades económicas».

El diputado, acompañado de Irune Yarza, la directora general de Hacienda, y de Yolanda Domínguez, subdirectora general de Gestión Tributaria, agradeció el trabajo realizado a los 200 profesionales del departamento. Se atendieron 67.250 llamadas (la cifra más alta de la historia), y el 55% de las declaraciones correspondió a propuestas lanzadas por el fisco. El 17,89% fueron mecanizadas (hechas en persona) y el 26,2% restante, vía interner.

Hacienda también dio cuenta de la campaña del Impuesto sobre el Patrimonio, que mejoró el resultado del año anterior hasta aportar 69,7 millones de euros, 1,1 más. Se trata de la mejor cifra desde 2017, cuando el ingreso neto fue de 74,6 millones. El número de declaraciones ha aumentado en 202, pasando de 8.531 a 8.753. Perona explicó que «en la campaña de Patrimonio se ve reflejada la evolución de los mercados financieros del 2022».