Interior de la planta de cogeneración de la empresa Iparlat de Urnieta. ZERO WASTE ENERGY

Empresas cogeneradoras de Gipuzkoa critican que no se aproveche la energía que producen

El sector, con 30 plantas en el territorio, denuncia que el Gobierno central les aboca a parar al no compensarles el alza del gas en el precio de la electricidad que generan

Jorge Sainz

San Sebastián

Viernes, 12 de agosto 2022, 06:45

Las empresas e industrias guipuzcoanas de cogeneración han puesto el grito en el cielo. Consideran que el Gobierno central les «castiga y discrimina» y no aprovecha la electricidad que producen a precios más baratos, al no compensarles por el alza del coste del gas en el precio de la energía eléctrica que venden. Estas industrias, que se definen como las «centrales de gas más eficientes del país», denuncian que la situación les aboca a parar o a cerrar justo en un contexto de crisis energética, por lo que consideran un despilfarro no aprovechar esta energía más barata.

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En Gipuzkoa existen una treintena de industrias de este tipo, unas sesenta en Euskadi y unas 600 en todo el Estado. Figuran principalmente industrias del sector papelero, pero también otras como Ampo o lácteos Iparlat, amén de distintos complejos hospitalarios (como Bidasoa o Zorroaga) y polideportivos como el de Usabal en Tolosa, y empresas químicas y madereras. Generan energía térmica (calor) y electricidad a través de sus propias plantas de producción, mediante la quema de gas. Parte de esa electricidad la utilizan para el funcionamiento de su propia industria y la que no necesitan se vende, a precios más baratos, para el consumo general por terceros. Pese a ello, denuncian que el Gobierno español no les reconoce el alza del precio del gas, como ha hecho con las centrales de ciclo combinado (las de las grandes compañías energéticas) tras aprobarse la 'excepción ibérica'. Les abona en torno a 230 euros el megavatio hora, menos que los 307 euros que paga a los ciclos combinados. De esta forma, condena a las cogeneradoras a una caída de su producción en torno al 60%, y a paralizar su actividad en muchos casos, denuncian fuentes de estas empresas guipuzcoanas.

Las cogeneradoras venden para consumo de terceros, a precio más barato, la electricidad que sobra en su producción industrial

La legislación, además, les penaliza con un complejo mecanismo por el que deben vender primero toda la electricidad que producen y, luego, comprar a la red general a precio de mercado (más caro) la que necesitan para su propia producción industrial, ya que por ley no pueden aplicar el autoconsumo energético. Además, los contratos para comprar gas obligan a estas firmas a abonar por adelantado todas las reservas que necesitan y ahora, al estar muchas de ellas paradas por los altos costes, están pagando por un gas que no consumen.

Ir a la Justicia

Estas plantas han pasado de producir el 11% de la electricidad en toda España, a solo el 4%. La cogeneración ahorra al año 15 teravatios hora de gas, equivalentes al consumo de dos meses y medio en todos los hogares y pymes de España o el de la industria en un mes.

Denuncian que el Estado no les reconoce en el precio el alza de gas, como sí hace con las empresas de ciclo combinado

La asociación estatal Acogen amaga con acudir al Tribunal Supremo y a la Justicia europea para denunciar una «distorsión de la competencia» con respecto a las centrales de ciclo combinado. «Es un sinsentido que las instalaciones más eficientes de generación de energía estén mayoritariamente paradas en España con la que está cayendo», denuncia Carlos Reinoso, presidente de Aspapel, miembro a su vez de Acogen. La asociación cree que el Gobierno favorece a los ciclos combinados por «las expectativas de compartir los ingresos con los ciclos vía impuestos».

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