Artola roza la excelencia en Azkoitia

Artola está con confianza, y cuando su mente se ve capaz de sacar todo su potencial puede ganar a cualquiera. Significativo que sus cinco primeros tantos fuesen de jugada magistralmente ejecutadas. Un derechazo atrás, un gancho de artista, una dos paredes elegante y dos dejadas al txoko en su segundo pelotazo tras violentos saques. Imposible comenzar mejor (1-5). Voló al primer descanso obligatorio gracias a otros tres buenos saques y un gancho maravilloso para alcanzar el cartón doce (2-12).

Elordi no sabía por dónde le daba el aire. Sus dos únicos tantos eran errores de Artola. Una pelota que se le cayó de zurda y un sotamano indefendible pero que tocó el fleje de la pared izquierda. Artola vuela y enfrente no ha tenido a dos cualquiera. Ezkurdia y el campeón. Es como si estuviese visualizando en su cabeza aquella final que no pudo vivir. La desea con ferocidad y no hay una sensación mejor que esa. «Estoy con confianza, con una motivación extra. No sé si soy el de 2021, no pienso demasiado en eso», verbalizó. Este Artola es una actualización mejorada, un 2.0, una versión premium. Tiene decisión y valentía para el remate. Va descarado. Pero es que luego hay que acertar y ejecutar como lo está haciendo. Le sale todo.

Para cuando se quiso dar cuenta, Elordi perdía 2-16. Tiró de rebeldía para maquillar el electrónico, pero Artola recuperó rápido el saque. Derechazos atrás, paradas al txoko, dejadas milimétricas. Una exhibición en todos los sentidos. Elordi levitaba por la cancha en el pasado Manomanista. Este parece ser el de Artola. Tan solo el tiempo dirá si le sirve para jugar aquella final que merece y que su cuerpo le negó, pero de momento no queda otra que disfrutar del camino. Saborearlo. Este Artola va en serio.