Zurutuza afila el colmillo

Es una de esas experiencias que todo piloto quiere tener alguna vez en su carrera». Xabi Zurutuza (Legazpi, 2006) se refiere al exhaustivo examen al que se ha sometido en uno de los centros de alto rendimiento más punteros que existen, el que tiene la firma Red Bull en Thalgau (Austria). Por allí han pasado todos los deportistas que Red Bull tiene en cartera (pilotos de Fórmula Uno, surfistas, atletas...) y el último ha sido el legazpiarra después de firmar por el equipo Red Bull KTM Ajo, con el que debutará próximamente en el Mundial de Moto3. Será el 10 de marzo en el circuito de Losail, en Doha, cuando cumpla el sueño de todo piloto. Por delante, un exigente y largo calendario –acaba en noviembre después de recorrer medio mundo– que obliga a Zurutuza a no perder ni un minuto en estas semanas previas. «Estamos metiendo muchas horas encima de la moto y también trabajando el aspecto físico porque lo que viene es motivador a la vez que superexigente», confiesa Zurutuza a este periódico desde Sallent, donde a su regreso desde Thalgau continúa su preparación y donde ha coincidido entrenando en los últimos días con pilotos a los que hace no mucho seguía por televisión y con los que ahora comparte horas como Valentino Rossi, 'Maverick' Viñales y Augusto Fernández, entre otros. En la última semana ha practicado 'flat trak', 'supermotard' en Sallent y velocidad en Monmeló.

El 'peinacabras', como le apodan a Zurutuza sus allegados, aspira a iniciar una larga y provechosa carrera mundialista después del buen papel que ha hecho en los últimos años en las categorías menores. Es lo que le ha permitido dar el salto al circo mundial con el equipo Red Bull KTM Ajo, donde competirá con el piloto de segundo año, el sevillano José Antonio Rueda, octavo en el Mundial de Moto 3 en la última temporada y campeón júnior en 2022. Será el primer guipuzcoano que afronta completo un Mundial.

Zurutuza no para. Hace nada rodaba en el circuito de Almería, donde sufrió una caída que no olvidará, esta semana ha estado en Brenes y en las últimas horas ha probado el asfalto de Montmeló. «Las sensaciones son positivas», resume. Él no lo dice, pero los registros que está marcando le situarían en la parte delantera de la parrilla. Está en ritmos de carrera de pilotos experimentados. Es una buena noticia que por otra parte no asegura nada.

Zurutuza ha vuelto del centro Red Bull con su libreta llena de anotaciones. «Han sido tres días intensos en los que he tratado de absorber todo lo que he encontrado», resume. Tuvo acceso a nutricionistas, fisioterapeutas, psicólogos, entrenadores personales y mucho más. El objetivo era evaluar y mejorar su rendimiento. Durante los tres días, Zurutuza recibió un chequeo médico completo, una evaluación fisiológica, un análisis del movimiento, además de consultas sobre nutrición, gestión del sueño y rendimiento mental.

En Thalgau han confirmado lo que ya sabían, han fichado a un piloto con la «cabeza muy bien amueblada, preparado para competir en Moto3, con mentalidad de campeón», apuntan fuentes próximas a su equipo.

«Siempre he creído en mí. Nunca me he puesto límites y estaba convencido de que antes o después iba a tener la oportunidad. Ahora me ha llegado y no quiero desaprovecharla», corrobora Zurutuza cuando echa la vista atrás. Su desmedida ambición es lo que le ha llevado a ser protagonista en Junior GP, la antesala del Mundial Moto3 de la que han salido buena parte de los pilotos que hoy se meriendan los titulares, y en la que fue progresando hasta ser una de las sensaciones con adelantamientos imposibles y carreras para el recuerdo como aquella en la que salió último desde los boxes y acabó ganando en Portimao.

El legazpiarra es un piloto fino, con trazadas muy abiertas, y no suele forzar demasiado el tren delantero. Sin duda, esto le hace ser un piloto muy consistente en carrera, que siempre suele tener un poco más en las vueltas finales, por lo que se supone que en categorías de mayor cilindrada como en la que va a debutar tendrá una buena base. Siempre se guarda una última bala. Se le suma su capacidad de adaptación y su buen ojo a la hora de trabajar sobre la configuración de la moto.

Será en el circuito del Algarve donde se celebrará el próximo test. Es un terreno en el que Zurutuza se siente cómodo. La cita, el jueves 22 y viernes 23 de este mes. El test oficial llegará una semana después en Jerez. A partir de esas fechas, todos los pilotos ya mirarán al estreno del Mundial en Doha. «Tengo ganas de pisar el piano», insiste Zurutuza en alusión al rojo y blanco del interior de las curvas de un circuito.

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