Los papeles del Caja Rural salpican al Euskaltel

La Fundación Euskadi se hizo eco de la información y emitió una nota a media tarde de ayer, que dice así: «Hoy, 6 de diciembre de 2023, hemos conocido por un medio de comunicación que Jesús Ezkurdia, antiguo miembro de la Fundación Euskadi, figura como investigado por un presunto delito de revelación de secretos. La Fundación Euskadi desea aclarar que: la persona investigada no pertenece ni tiene vinculación alguna con la Fundación Euskadi. La Fundación Euskadi no tiene ninguna relación con los hechos que se investigan. La Fundación Euskadi es una entidad que trabaja para promover, fomentar, divulgar y desarrollar el deporte del ciclismo vasco y sus valores».

El Juzgado de Instrucción número tres de Vitoria le habría llamado a declarar por el envío de la citada documentación desde la oficina de Correos de la capital alavesa, cuyas cámaras de seguridad habrían permitido su identificación por parte de la Guardia Civil a raíz de la denuncia interpuesta por el equipo Caja Rural por estos hechos. El citado juzgado estaría instruyendo una causa por un presunto delito de revelación de secretos.

El tema colea desde la Vuelta a España, cuando los documentos llegaron a las sedes de la agencia española antidopaje, a la Federación Española de Ciclismo, a Unipublic, organizadora de la Vuelta, y a los mánagers de los equipos de la carrera. Los envíos constaban de algunos documentos que formaban parte del sumario (doce folios de los más de 1.500 que conforman la causa) de la Operación Ilex antidopaje, en la que se investiga a Maynar y por la que está sancionado Miguel Ángel López.

En los documentos se menciona a varios corredores del equipo navarro y a su mánager general, Juanma Hernández, que se defendió en Diario de Navarra donde dijo que «Caja Rural no se tiene que esconder porque no ha hecho nada malo». La filtración llegó en plena Vuelta a España, donde competía el Caja Rural. El director general de la carrera, Javier Guillén, se reunión con el equipo y al día siguiente el conjunto navarro retiró a su mejor corredor, Orluis Aular, citado en los documentos. Sin embargo, a renglón seguido alineó al venezolano en la Vuelta a Croacia, donde ganó una etapa y se anotó la general.

El Caja señaló que la filtración podía provenir de un equipo rival que se había quedado sin correr la Vuelta a España. Aunque no tramitó la denuncia contra ninguna persona por «desconocer» su identidad, se señalaba a los dos equipos que no habían recibido la invitación, Euskaltel y Kern Pharma, que sí obtuvieron el Burgos y el propio Caja Rural.

La noticia de la presunta implicación de Ezkurdia en el envío de documentos y la posibilidad de que el hecho constituya un delito de revelación de secretos ha tenido un impacto fuerte en el seno de la Fundación Euskadi. Ninguno de los miembros de su patronato ha recibido notificación alguna ni nadie de la actual Fundación ha sido llamado a declarar.

La salida de Jesús Ezkurdia de la Fundación en octubre es ajena a esta investigación judicial. Su relevo se debió a un cambio en la gestión y en la gobernanza, como consta en el acta donde se recoge su salida, a finales de octubre. Los actuales gestores aseguran que no estaban al tanto de estas supuestas aciones individuales de una persona que en el momento de los hechos tenía unos cargos en la estructura.

Por el momento, las supuestas prácticas de dopaje que se denuncian en estos documentos no han acarreado expedientes ni sanción alguna.