David de Jorge a Martín Berasategi en TVE: «¿A dónde hemos venido?»

Los cocineros vascos Martín Berasategui y David de Jorge son un dúo incombustible, que arrasa con su energía allá donde vaya. La noche de este martes hicieron gala de ella en el plató del programa 'La noche D', donde hablaron de gastronomía, garrote y guarrindongadas. Dispuestos a pasar un buen rato, menos a una cosa: bailar.

La presentadora del programa Eva Soriano les recibía después de haber entrevistado al cantante Andrei Ionut, el representante de Rumanía en el último festival de Eurovision. Con el rtimo en el cuerpo, los dos cocineros llegaban al plató con algo de miedo. «Venía acojonado. Os movéis mucho, me pone un poco nervioso», aseguraba David de Jorge. «Nosotros somos vascos, estamos hechos como un bloque», explicaba acto seguido, y reconocía que le había dicho a su colega cocinero: 'Martín, ¿dónde hemos venido?'.

Eva Soriano les explicó que «en cualquier momento puede entrar alguien» y podría tocar subirse a la mesa que tenían delante «porque aquí somos muy de bailar». Con humor, David de Jorge le advertía: «Como me tenga que subir a la mesa a bailar igual colapsa».

Las risas y los buenos momentos no faltaron a lo largo de la charla que mantuvieron con la presentadora, en la que repasaron los éxitos de ambos cocineros: Martín Berasategui atesora 12 estrellas Michelin en sus restaurantes, mientras que David de Jorge ha sido 2 veces declarado mejor cocinero de España.

Entre ellos, solo buenas palabras. A la hora de explicar qué es el garrote de Martin Berasategui, de Jorge contó que es lo que define a «un tío grande, profesional y super generoso. El garrote lo guarda cuidando a su gente, a sus clientes, a sus amigos, a sus socios... Desde que estoy con él yo soy mucho más feliz».

Por su parte, de Jorge se definió como un 'quemaceboller', «ni youtuber ni influencer». O lo que es lo mismo, como comentó: «es dejarse de chorradas, quemarte las pestañas, los pelos de los brazos, trabajar, picar cebolla y entusiasmar a la gente con lo que te gusta, que es el sofrito, con reasar el culo de la cazuela. Que la gente no se entusiasme con la nata fofa de la superficie y conseguir que bucee y que meta la cabeza en el sofrito y la salsa de los callos».

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