El ataúd frente a la sede de Lakua quiso simbolizar ayer «la muerte de la cultura». JESÚS ANDRADE

Un féretro con la cultura dentro

Un centenar de artistas, personal técnico y de producción escenifican el «funeral» de las artes escénicas frente al Gobierno Vasco

Ramón Albertus

VITORIA.

Domingo, 14 de junio 2020, 08:28

Un féretro y un cortejo compuesto por un centenar de profesionales de las artes escénicas. Con esta 'performance', el sector de los espectáculos en vivo ... se concentró ayer al mediodía frente a sede central del Gobierno Vasco en Lakua para reivindicar medidas de apoyo a una industria –«víctima invisible de esta pandemia»– que mantiene la incertidumbre acerca de la vuelta de la actividad.

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La concentración, que reunió a personal técnico, artístico y de empresas del sector, es la tercera que se celebra en el País Vasco esta semana. Este mismo viernes, diferentes agentes culturales firmaron el manifiesto S.O.S Kultura que leyeron en las tres capitales vascas en el que se demandaba la «reactivación», así como apremiar a la búsqueda de alternativas para celebrar eventos respetando las medidas sanitarias. Un día antes, un colectivo formado por técnicos de espectáculos y eventos quiso dar visibilidad al parón que sufren los profesionales que están detrás del telón. Como denominador común, las exigencias a las instituciones de que no se limiten a cancelar actos si no que abran la mano a formatos diferentes.

En la misma línea, la plataforma Kupla –Kultura Plataforma– escenificó este «funeral de la cultura», cuya ofrenda fueron guantes, cascos, focos o un micrófono que iban depositando a los pies del féretro diferentes profesionales del sector. También una docena de coches con banderas negras desfilaron frente a la sede del Gobierno vasco como parte del cortejo.

«Ayudadnos a reanimar, a revivir y a hacer más fuerte a la cultura», subraya el comunicado de esta iniciativa que además de reivindicar medidas de apoyo al sector solicita a las instituciones colaboración a la hora de «realizar los protocolos de desescalada del sector».

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Entre las caras conocidas de esta concentración se encontraba Francis Díez, cantante de Doctor Deseo y uno de los encargados de portar el ataud hasta la entrada de Lakua. «Queremos poner el foco sobre un sector que va a quedar muy afectado. Por cada músico en el escenario hay cuatro trabajadores que han visto cómo su empleo ha parado 'sine die'. Y no se trata ya solo de pensar en medidas para quienes están sobre el escenario y técnicos. También en el futuro de salas como Jimmy Jazz, Hell Dorado (Vitoria), Santana y Antzokia (Bilbao) o las de Donostia».

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