Ekain celebra el 50 aniversario de su descubrimiento

Una amplia programación cultural, que incluye un acto de homenaje en el Victoria Eugenia, la inauguración de un nuevo espacio frente a la réplica de la cueva, una exposición itinerante y un acercamiento a las formas de vida de hace 14.000 años, conmemorará a lo largo de este año el medio siglo transcurrido desde el descubrimiento de Ekain y sus pinturas rupestres en Deba.

Fue un 8 de junio de 1969 y hoy, el diputado foral de Cultura, Denis Itxaso, ha presentado esta batería de actos, junto a los alcaldes de Deba, Pedro Bengoetxea, y Zestoa, Josetxo Mendizabal; el director de Patrimonio Cultural, Mikel Aizpuru; el representante de Aranzadi Juantxo Agirre; y el gerente de Ekainberri, Juanjo Aramburu. Si el año pasado se celebró la primera década de existencia de la réplica de Ekain construida en Zestoa, esta vez le toca conmemorar a la propia cueva debarra.

La programación tendrá su día grande el 7 de junio, con un espectáculo de música, danza, proyección de documentales y pequeñas charlas, a celebrar en el Victoria Eugenia de Donostia. En este acto se homenajeará a los descubridores de la cueva y a cuantas personas han ayudado a su conservación y difusión a lo largo de estos cincuentas años. Una publicación, que se presentará en el acto del día 7 de junio, pondrá al día los conocimientos acumulados en torno a la emblemática cueva y las circunstancias que rodearon su descubrimiento, un momento en el que los partidarios de preservar las pinturas cerrando la cueva al público se impusieron a los defensores de 'socializar' su contenido mediante el libre acceso a este espacio.

Durante la presentación de esta mañana, los representantes institucionales y de entidades como Aranzadi se han felicitado por las decisión adoptada en su momento, que ha permitido la preservación de la cueva de Ekain, así como por la construcción de una réplica que ha recibido más de 300.000 visitantes en sus once años de existencia. Al día siguiente, fecha exacta de la efeméride, se realizará un acto en Ekainberri que, a falta de concretar, podría contemplar la colocación de una placa de la Unesco.

También en junio, Ekainberri inaugurará su campamento prehistórico en la campa situada frente al edificio y en donde se reconstruirán las condiciones de vida de la época. Finalmente, ese mismo mes la réplica de la cueva se sumará al Día Internacional de las Cuevas y el X festival Ekainfest mostrará cómo vivían hace 14.000 años los habitantes de la cueva y de su entorno, y que incluirá la celebración de las Olimpíadas Prehistóricas de cada año. «Será la ocasión perfecta para ver de cerca cómo hacían fuego, las técnicas de caza, la vestimenta y el arte de la época».

Mención especial merece la exposición itinerante que arrancará próximamente en el Palacio Agirre de Zestoa con reproducciones a gran tamaño de los cuarenta calcos originales que se obtuvieron tras el descubrimiento de Ekain, bajo la supervisión de José Miguel Barandiaran y Jesús Altuna. Estos calcos son las primeras imágenes que se difundieron sobre el contenido de la cueva, en este caso, a través de la revista Munibe, y que se han adoptado como logo de la celebración este cincuentenario.

La celebración de la efeméride brindará también la posibilidad de visitar –para un grupo muy reducido– la cueva de Danbolinzulo, cerrada al público para la preservación de sus pinturas, en una «oportunidad extraordinaria y una visita especial» que tendrá lugar a mediados de marzo, con motivo de la celebración del Mes de los Museos de la Costa Vasca.

Otras iniciativas que se llevarán a cabo a lo largo del año será la celebración del aniversario de Ekainberri (11 de septiembre), el undécimo aniversario del ingreso de esta infraestructura como Patrimonio de la Humanidad.

La cueva de Ekain fue descubiera el 8 de junio de 1969 por los azpeitiarras Andoni Abizuri y Rafael Rezabal. Las 64 pinturas y seis grabados –con predominio de la representaciones de la figura del caballo– de la Era Magdaleniense la convierten en uno de los vestigios prehistóricos más importantes de la cornisa cantábrica. La cueva, que muestra también representaciones pictóricas de osos, ciervos o cabras, se divide en diferentes galerías denominadas en función de los dibujos que albergan: Erdibide, Auntzei, Erdialde, Zaldei, Artzei y Azkenzaldei. Las pinturas fueron declaradas Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesto el 7 de junio de 2008, junto con otros catorce santuarios de arte rupestre de la Cornisa Cantábrica como Altxerri y Santimamiñe.

Cerrada al público por motivos de conservación de las pinturas, Ekain encuentra su mejor aproximación en la réplica inaugurada en 2008, en un edificio propiedad de la Fundación Ekain conformada por Diputación, Gobierno Vasco y Ayuntamiento de Zestoa, localidad de acoge la instalación. Desde entonces, más de 500 centros de enseñanza –su gran fuente de visitantes– han participado en las actividades diseñadas por la propia réplica, que alberga también un Centro de Documentación sobre la Prehistoria.